Madrid.- El presidente del Consejo Coordinador Empresarial mexicano (CCE), Juan Pablo Castañón, afirmó hoy aquí que la modernización del Tratado Comercial Unión Europea-México “es positivo para el comercio del país y facilitará las inversiones mexicanas en Europa”.
Juan Pablo Castañón, señaló que “se está satisfecho con la negociación” cerrada el fin de semana entre México y la UE.
Explicó que el acuerdo se alcanza en un momento en que México necesita diversificar sus mercados de exportación, por lo que “abre expectativas buenas para productos alimenticios en su comercio a Europa”.
Recordó que México eligió dar impulso a su economía, entre otras cosas, con el aumento de las exportaciones y es una estrategia que ahora abre acceso a productos cárnicos, jugos de frutas y otros.
Sobre la industria láctea nacional, Castañón apuntó que sale menos favorecida del acuerdo, por lo que se preparará un programa de fortalecimiento para que pueda tener un crecimiento a nivel interno y tenga otras alternativas de exportación.
Celebró que los negociadores del acuerdo pudieran superar las diferencias y generar un equilibrio entre el modelo mexicano de marcas para los quesos, y las denominaciones geográficas de origen de Europa y hacer que entren la mayor parte de las que hay en cada lado.
Además, refirió que el acuerdo “facilita las inversiones mexicanas en Europa, y principalmente en España no solo por el idioma sino la cultura compartida y las altas relaciones que ya hay entre los dos países”.
Recalcó que para las empresas españolas se abren también oportunidades con los proyectos de las siete Zonas Económicas Especiales, mientras que muchas mexicanas quieren tener más presencia en España y de ahí a otros países de la UE y en algunos casos de Medio Oriente.
El dirigente de la patronal mexicana subrayó que del acuerdo también es positivo para las empresas mexicanas la posibilidad de concursar en licitaciones de proyectos en ambos lados, algo en lo que México ya ha estado abierto porque requiere inversión en infraestructura.
Castañón abundó que las principales necesidades surgen de tener mayor infraestructura que conecte al sur-sureste del país.
Precisó que en México la inversión en infraestructura es equivalente al 20.1 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), que es el 19 por ciento del sector privado y 1.7 por ciento del público.