El Gobierno del Estado impulsa la agricultura sostenible en mil hectáreas de tierras zacatecanas en las que la productividad se traduce en bienestar para las familias, recuperación de suelos y cosecha de agua, que guarda la humedad para el próximo ciclo agrícola otoño-invierno.
Ante la erosión acelerada del suelo por fuentes pluviales y eólicas, la baja productividad -en promedio 500 kilogramos de frijol por hectárea- la administración de Alejandro Tello unió esfuerzos con el gobierno federal, a través de distintas dependencias, para realizar el programa de agricultura sostenible.
Las prácticas de labranza sustentable hicieron posible que, en el último año, bajara el costo de producción de 6 mil 500 a 3 mil 40 pesos, e incrementara el rendimiento, de 800 kilogramos a 1.2 toneladas por hectárea. Con el método tradicional obtuvieron utilidades de 4 mil 684 pesos por hectárea; con éste, 11 mil 690 pesos.
Durante un recorrido que realizó el Secretario del Campo, Adolfo Bonilla, en el que participaron estudiantes, técnicos, investigadores y productores de varios municipios, observaron los beneficios de la rotación de cultivos de frijol a los forrajeros, como avena, trigo y triticale, los que regresan los nutrientes a la tierra.
Recorrieron las parcelas en las que siembran frijol con 119 mil plantas por hectárea; producción de composta y lixiviados; plantación de garbanzo y lenteja, maíces híbridos y criollos.
Ahí practicaron análisis de suelo para determinar ph, macro y micro elementos, que permiten a los productores decidir qué semilla utilizar, tipo de cultivo, fertilizantes y control de plagas orgánicos. Además, las sembradoras y cosechadoras de alta precisión y la nivelación de suelos, disminuyen los costos.
Ante el interés de los agricultores por incluir a los jóvenes en las tareas del campo e interesarlos en las innovaciones agrícolas y tecnológicas para la conservación de suelos, Adolfo Bonilla dijo que el trabajo responsable que hace productivo el campo es la clave.
Como ejemplo, mencionó esas 20 hectáreas en las que sembraron frijol con alta densidad, las que generaron utilidades por 116 mil 900 pesos, mientras que en las fábricas un joven tiene ingresos anuales de 60 mil pesos.
Jorge Alberto Acevedo, de la Agencia de Desarrollo Rural Case destacó los beneficios del programa de Agricultura Sostenible: bajaron los costos de producción en 50 por ciento, incrementaron los rendimientos entre 400 y 600 kilogramos por hectárea; recuperaron el agua y la humedad de la tierra, y evitaron la erosión de la tierra.
Participaron en este recorrido, el delegado de Sagarpa, Roberto Luévano Silva; el presidente municipal de Sombrerete, Alán Murillo; la diputada local, Karla Valdez; Nicolás Morales, de la Universidad de Chapingo, y Carlos Villalobos, de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
