La inseguridad no se resuelve cambiando mandos, pero puede contribuir a la solución, señaló el obispo de la Diósesis de Zacatecas, Sigifredo Noriega Barceló, en cuestión al nombramiento del nuevo secretario de seguridad pública, Ismael Camberos Hernández.
El obispo manifestó que la inseguridad es un problema social que con el cambio de una persona no tendrá arreglo, es un problema en el que sociedad, autoridades y organizaciones deben trabajar.
Expresó que ante los cambios realizados, la sociedad debe esperar una solución gradual, que conforme la prevención, contención y profesionalización de elementos policiacos que se está aplicando, los cambios serán lentos, pero seguros.
Enfatizó que urge bajar el índice delictivo, sin descuidar la vida del día a día, porque se tienen robos, peleas, entre otras acciones que van destruyendo el tejido social, por lo que constantemente se debe evaluar los resultados que generan estos cambios, para cerciorar como vamos, y mejorar estrategias.
Si la legislatura puede combatir la corrupción e impunidad, debe hacerlo
Con respecto a las propuestas que se han planteado dentro del congreso del estado, que proponen las iniciativas de revocación de mandatos y erradicación del fuero, el obispo refirió que todo aquello que abone para que exista una mejor convivencia social, tiene que impulsarse.
Señaló que si uno de los problemas grandes que tiene México es la corrupción e impunidad, se debe buscar los medios para combatirlos, y si la legislatura es un medio con las posibilidades y funciones para contribuir, debe hacer lo suyo.