Bernardo Hernández/PórticoOnLine
Para el diputado local del PT, el problema con la deuda zacatecana, superior a los 5 mil 300 millones de pesos, es que se han privilegiado los intereses de los gobernantes en turno y de los banqueros en perjuicio de la estabilidad política, social y financiera de Zacatecas.
Sobre la estimación de intereses, 3 mil 097 millones de pesos según la Secretaría de Finanzas, que Zacatecas pagará por concepto de cuatro créditos en las próximas tres administraciones estatales, José Luis Figueroa recordó que las advertencia se hicieron a tiempo y simplemente fueron ignoradas.
“La UAZ lo dijo, que con los empréstitos, la complejidad que se heredaba a futuras administraciones es mayúscula, serán sexenios complejos porque podrían acabar pagando hasta el triple del capital solicitado”, expuso.
El legislador consideró que es preocupante la enorme cantidad de recursos que invertirá el estado en el pago de intereses de los empréstitos contratados con Banorte, Bancomer y Banobras. Además, dijo, sigue sin respuesta la cuestión de “¿En beneficio de quién estuvo endeudar de esa manera a Zacatecas?”.
Figueroa Rangel ve muy negra la situación de Zacatecas en el corto plazo. A una deuda que ya es grande, dijo, habrá que agregar dos nuevos empréstitos que le fueron autorizados al gobierno estatal en la Ley de Ingresos para este año: uno por 1 mil 700 millones de pesos para cubrir el déficit de gasto educativo y otro por 200 millones de pesos para el Metrobús.
“Está siendo desastroso, si a eso le sumamos al déficit en infraestructura, en salud y el rezago social en la entidad, queda claro que los únicos que están ganando son los bancos y quienes hacen negocios hacen con ellos”, declaró.
En cuanto a la posibilidad de aplicar un freno al endeudamiento de la entidad, comentó, que no hay manera de ponerle un alto.
“El único freno posible es el que el gobernador tuviera conciencia, entonces, no hay freno, no va a haber freno, se van a aplicar (nuevas deudas) porque les conviene a los gobernantes y a los bancos y los zacatecanos vamos a cargar con ello”, afirmó.
Para Figueroa, la fórmula es simple: las deudas derivadas de la corrupción o la incapacidad de los malos gobiernos se pagan con el alza a los impuestos.