El asesinato y la desaparición de estudiantes de la Normal de Ayotzinapa y otros actos de corrupción en torno al alcalde de Iguala, José Luis Abarca, pudieron haberse evitado, asegura el presidente del Senado, Miguel Barbosa.
“Si en iguala se sabía que el presidente municipal tenía vínculos con el crimen organizado, ¿por qué no se actuó a tiempo?, es una pregunta ¿eh?, para la autoridad federal y para la autoridad local…”
Y es que, dice Barbosa, es un hecho que el crimen organizado ha penetrado todas las esferas de la vida nacional, incluida la política, y por tanto es necesario que los partidos políticos pongan un primer freno a esta práctica y las autoridades de todos los niveles castiguen los actos de corrupción sin importar quién caiga.