Las reformas estructurales han sido un fracaso, indicó el senador del Partido del Trabajo David Monreal Ávila, pues “la Reforma Educativa mantiene a los maestros en las calles; además no se ha implementado y no tiene trascendencia alguna”.
Asimismo, expuso que el Instituto Nacional Electoral (INE) otorga mayores atribuciones y facultades a los partidos políticos, pero trata con más desdén al ciudadano y empobrece su participación.
En ese sentido, aseveró que esta crisis que vive el INE obedece a la intensión del Gobierno Federal de “a como dé lugar manejar el proceso electoral mediante la Secretaría de Gobernación y las diferentes secretarías de estado”.
Esto luego de que se dieran a conocer algunos señalamientos hacia algunos actores políticos del Partido Revolucionario Institucional (PRI)y el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) respecto a la compra de votos y el uso de recursos públicos para hacer campaña.
Así pues, sostuvo que la crisis del INE da como resultado la desconfianza de la ciudadanía y hasta de los institutos políticos. En la ciudadanía, dijo, existe una postura de decepción que el sistema se está ganando a pulso.
Monreal Ávila indicó que dicha reforma ha sido un fracaso debido a que no se escuchó la propuesta del ciudadano para la conformación del órgano electoral y así hacer un esfuerzo para ciudadanizarlo; que fueran las organizaciones sociales y los especialistas quienes propusieran los nombramientos de consejeros y magistrados .
En otro tema, expuso que la Ley del ISSSTEZAC no existe claridad para el trabajador y abunda la desconfianza y el desconocimiento, pues no se le dio la oportunidad al trabajador de opinar al respecto.
Aseveró que al igual que en otras reformas y modificaciones a las leyes, era necesario abrir una discusión donde participaran los trabajadores y los especialistas en Derecho Laboral para la conformación de la nueva ley y para debatir acerca de la sanción de quienes afectaron dicho patrimonio, pues sólo se le informa al trabajador de la crisis pero no se le explican las razones ni se evidencia a los culpables.
Opinó que es un exceso el hecho de que aumenten la edad de jubilación a 65 años de edad, pues el promedio de vida del mexicano es precisamente de 65 años, por lo que con suerte podrá disfrutar de su retiro.