ZACATECAS.- A tres años de estar al frente de la diócesis zacatecana, Sigifredo Noriega Barceló agradeció a la vida consagrada, a los laicos y a la sociedad zacateca por el respaldo, dijo, “aún quedan grande retos”.
La máxima autoridad católica en el estado, señaló que un reto importante en la vida cristina de Zacatecas es la evangelización en un mundo cada vez más desevangelizado y que cada vez está más alejado del camino a la vida cristiana y del camino de la fe.
Por ello es indispensable trazar una ruta a 2020 para tocar diversos temas claves, ejemplo de ello es la evangelización del 60 por ciento de las 119 parroquias, a través de conocer cómo inicia su vida un cristiano del siglo XXI.
Por lo anterior, anunció que un reto fundamental para 2016 será el tema de las familias.
Como resultado del Congreso Movilidad Urbana y Migración, se destacó la necesidad de mayor toma de conciencia y reconocer que la movilidad urbana no sólo abarca al inmigrante, a las personas que lo rodean así como a la migración interna.
Sobre la compleja situación que se vive en el tema de la migración, lamentó el aumento de trata de personas, problema que se ha convertido en un reto para la iglesia, el estado y la población, dijo, “algunos hablan de que este fenómeno es la nueva esclavitud de nuestro tiempo”.
Sobre el tema de inseguridad en el estado, señaló que estos hechos de violencia son el resultado del lado oscuro de los seres humanos, el factor económico, la pérdida de valores y la desintegración familiar.
Por ello hizo un llamado a actuar como población, “hay que entrarle de lleno para poder hacerle frente a esto(…) la violencia siempre ha existido y siempre existirá, pero hoy podemos hacer algo entrando al ritmo de recomponer a la familia “.