ZACATECAS. “Nada cae del cielo ni se resuelve en un día”, sentenció el obispo de la Diócesis de Zacatecas, Sigifredo Noriega Barceló, sobre la resolución de casos de personas desaparecidas y victimas de la delincuencia.
Precisó que las investigaciones llevan tiempo y que no se trata de ejercer ningún tipo de presión sobre las autoridades sino más bien, de coadyuvar esfuerzos.
“Ningún homicidio sucede por accidente, siempre hay personas detrás” precisó Noriega Barceló sobre el violento año vivido Zacatecas.
Declaró que el núcleo familiar es parte importante para la prevención del delito, además del acercamiento a la iglesia.