La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) dio a conocer los resultados obtenidos en el estudio de calidad que aplicó a 32 productos de aceites comestibles, de los cuales 9 son de aguacate, 14 de ajonjolí, 2 de cacahuate y 7 de uva.
A través del Laboratorio Nacional de Protección al Consumidor, la Procuraduría llevó a cabo este estudio del 5 de febrero al 15 de abril de este año, los aspectos analizados fueron la información comercial, el contenido neto, la autenticidad, tendencia al envejecimiento, a volverse rancio y al cambio de sabor, aplicando la normatividad nacional vigente.
El hallazgo principal del estudio es que en 8 productos, se encontró que los aceites no son puros, 4 de aguacate, 3 de ajonjolí y 1 de uva, y si bien no representan riesgos para la salud de los consumidores, hay engaño, pues el producto no es lo que oferta.
Los productos detectados como adulterados son:
- San Lucas, Aceite de pepita de uva, presentación de 500 ml.
- Cate de mi corazón, Aceite de aguacate Mediterráneo, presentación de 250 ml.
- Avocare, Aceite de aguacate 100% de origen natural, presentación de 250 ml.
- Cate de mi corazón, Aceite de aguacate, presentación de 250 ml y 500 ml.
- San Lucas, Aceite de aguacate extra virgen gourmet, presentación 500 ml
- Kaporo, Aceite de ajonjolí Blend, presentación de 190 ml.
- Foreway Sesame Expert, Aceite de ajonjolí, presentación de 185 ml.
- Kum Chum, Aceite de ajonjolí prensado en frío, presentación de 248 ml.
En cuanto al contenido neto se encontró que los productos SATORU, aceite de ajonjolí de 275 ml así como LA COCINA VERDE, aceite de ajonjolí orgánico de 520 ml no cumplieron con sus declaratorias.
Todos los productos con falta o incumplimiento fueron sujetos a procedimiento por infracción a la ley y están en proceso de la sanción que en su caso corresponda.
Asimismo la Profeco recalcó la importancia de almacenar estos productos donde no haya luz ni calor pues se acelera la tendencia al envejecimiento.