Por Juan Gómez
Cuando faltan solo 84 días para que los zacatecanos emitan su voto para elegir a sus representantes populares, el gobierno del estado de Zacatecas comete la peor represión en contra de las jóvenes que conmemoraban el Día Internacional de la Mujer, con la concentración más numerosa que se haya registrado en este género en la capital zacatecana.
El acto de agresión en contra de las mujeres que participaban en la marcha, marcará a la actual administración morenista de David Monreal Ávila, quien desde el inicio de su mandato, se ha mantenido en el último lugar de la aceptación ciudadana, rechazo que a partir de este viernes, se ahondará e influirá en la tendencia electoral.
La línea de agresión gubernamental era muy clara, puesto que desde un principio el Secretario General de Gobierno, Rodrigo Reyes Mugüerza, amenazó con reprimir la manifestación del 8M e intentó intimidar con advertencias, como la de recoger artefactos como martillos, mazos, bombas molotov, etcétera y la de colocar módulos de la Fiscalía General de Justicia del estado a lo largo del trayecto, así como efectuar detenciones.
El responsable de la política interna del estado fracasó en su discurso y en su función, debido a que los mensajes sobre la seguridad en la marcha, correspondían al Secretario de Seguridad Pública General, Arturo Medina Mayoral.
El funcionario evidenció su incapacidad para el desempeño de esta importante función, así como su inexperiencia y perfil autoritario, pero además, durante su actuación, también ha incurrido en otro tipo de intromisiones, al asumir tareas de la coordinadora de Comunicación Social y de la Vocería de la Mesa de Construcción de Paz y Seguridad, a las que ha suplantado a través de sus videos y textos informativos en sus redes sociales.
En la marcha del 8M se incurrió en varios excesos y violaciones:
Violencia de Género
Retención ilegal de víctimas
Uso Excesivo de la fuerza
Violación a la libertad de expresión
Violencia sicológica
Después de la brutal represión y de la retención ilegal de 14 marchistas, la diputada morenista de la LIV legislatura de Zacatecas, Gabriela Pinedo Morales, a quien por cierto, Rodrigo Reyes Mugüerza, sustituyó en la Secretaría General de Gobierno, se apersonó en el centro de detenciones donde se encontraban las víctimas, y a su salida, intentó minimizar la situación de las retenidas.
Las están tratando bien, dijo la ex funcionaria a las compañeras de las víctimas retenidas ilegalmente.
Ese es el nivel de los funcionarios y ex funcionarias que tienen en el actual gobierno morenista zacatecano.
Por cierto la secretaria de la Secretaría de las Mujeres del gobierno estatal, Karla Guardado Oropeza, ha callado ante esta atrocidad.
El silencio cómplice de la funcionaria es un botón de muestra de su falta de empatía, sororidad y de su compromiso de sumisión ante el gobierno para el que trabaja.
En contraparte la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Zacatecas, Maricela Dimas Reveles, manifestó de inmediato su preocupación por los hechos ocurrido durante la marcha conmemorativa del Día Internacional de la Mujer y su rechazo al uso excesivo de la fuerza, por parte de las corporaciones policíacas en los hechos.
Las imágenes de la represión fueron nota en los principales noticieros televisivos del país, y se convirtió en una tendencia en las redes sociales, en donde se continúa compartiendo los videos de esta reprobable agresión.
La actual administración que se ha convertido en un lugar de yerros, incapacidades, ocurrencias; en violación a los derechos laborales; en desacato a la ley en el pago de pensiones; en debilidad en el combate al crimen organizado.
Llevará como sello distintivo la represión contra las mujeres.
El Secretario General de Gobierno, Rodrigo Reyes Mugüerza, le debe una disculpa a las mujeres agredidas y después, presentar su dimisión al cargo, en el que ha mostrado su incapacidad e inexperiencia para desempeñarlo.
Que grotesca contradicción, en el “Año de la Paz” que el gobierno intenta posicionar discursivamente, se comete la peor brutalidad contra mujeres que denuncian impunidad en la impartición de justicia, violaciones, desapariciones forzadas, asesinatos, violencia laboral e inequidad salarial, etc., en una marcha para conmemorar el Día Internacional de la Mujer.
El pago electoral de esta factura, se verá reflejada el 2 de junio, la elección intermedia que marcará el ahondamiento de la crisis gubernamental.
Al tiempo.
@juangomezac
- Gráfico tomado de las redes sociales