Saúl Alfonso Hurtado
Este mes de marzo, dedicado a las mujeres, las autoridades en materia financiera del país y organismos afines, han destacado la necesidad de fortalecer el papel femenino en el sector de las finanzas, toda vez que son pieza clave para impulsar el crecimiento económico. Esta estrategia va desde el acceso a servicios financieros básicos a la participación en los directorios de las corporaciones.
No basta tener productos y servicios financieros a nuestro alcance, se requiere de estrategias que permitan el mayor conocimiento del ámbito financiero, su funcionamiento y sacarle provecho.
En la actualidad, en el mundo el 42 por ciento de las mujeres está fuera del sistema financiero formal, no tienen alguna cuenta bancaria u otras herramientas básicas para administrar su dinero.
Un gran número de mujeres son propietarias de pequeñas y medianas empresas en los países en desarrollo, pero más del 70 % no tiene acceso a instituciones financieras o no recibe servicios financieros adecuados para satisfacer sus necesidades. Pero existen un amplio sector que no ha tenido esa posibilidad y como amas de casa, también planean, controla y administran su dinero.
El caso particular de nuestro país, de acuerdo con la última Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (2021), elaborada por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), 61 por ciento de las mujeres y 74 por ciento de los hombres en nuestro país tienen al menos un producto financiero formal. Esa disparidad se replica en aspectos como acceso a una cuenta de ahorro (42.6 por ciento contra 56.4 por ciento, respectivamente) o tenencia de seguro privado (16.4 por ciento contra 26.1 por ciento, respectivamente).
Po ello, la importancia de fortalecer las tareas de inclusión financiera para las mujeres y de esta manera, ya que representan una base fundamental para el crecimiento de las regiones.