Cerca de dos mil migrantes, la mayoría de origen venezolano, quedaron varados en Zacatecas. Un contingente de migración ya los estaba esperando y con el uso de la fuerza, obligaron a los pasajeros de la vestía a descender de los vagones para evitar continuar con su viaje.
“El tren no se va a mover, les estoy avisando y si quieren aquí quédense”, dijo Ignacio Fray de Migración.
Los venezolanos denunciaron que el trato fue inhumano hacía migrantes, niños, mujeres y familias completas, estuvieron varados desde las 12 del día.
Algunos migrantes lamentan que el gobierno mexicano no los deje comprar boletos de avión o autobús, porque de otra manera aseguran que no estarían viajando en “La Bestia”.
“Nos está obligando a exponernos a que lleguemos mal, hubo un tren que bajaron a todos, les quitaron comida, agua y les dijeron caminen”, expresó una migrante afectada.
Esta crisis está terminando con la ayuda que tenían los activistas, por lo que piden a la sociedad apoyo, como ropa, comida.