El presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) en la Cámara de Diputados, Silvano Aureoles Conejo, llamó a las autoridades del sector salud y a los gobiernos federal y estatal a redoblar los esfuerzos en las zonas con menores recursos ante la creciente de casos de influenza AH1N1.
En un boletín de prensa, el diputado del PRD consideró que la ola de frío que azota a gran parte del país representa un foco rojo, sobre todo con el incremento de enfermedades respiratorias, que afectan de manera más severa a personas que viven en zonas de alto riesgo, pobreza y marginación.
“Hasta hoy hemos escuchado casos de contagios en las principales ciudades o poblados, sin embargo, existe la preocupación de que haya zonas del país de las que no se tenga noticia y que en este momento estén brotando casos de influenza, y lo peor aún es que haya muertes por falta de atención oportuna“, alertó.
Ante ello, pidió a todas las autoridades ubicar zonas de alto riesgo de contagio de la Influenza para que hagan llegar los servicios de prevención y atención.
Pese a la emergencia, el diputado reconoció las acciones que los gobiernos locales y el federal han emprendido para hacer frente a este virus de la influenza; sin embargo, dijo que no es suficiente, pues según datos difundidos en los últimos siete días, la cifra de padecimientos y muertes supera por mucho la registrada en 2009.
De acuerdo con el boletín, Aureoles constató en días pasados que en su entidad en los poblados más alejados se ha registrado la presencia de esta enfermedad en su etapa estacional, incluso ya ha cobrado la vida de al menos nueve personas.
“Eso pasa en Michoacán, pero también en ciudades como el Distrito Federal, Jalisco, San Luis Potosí, Nuevo León o Aguascalientes. Por eso es importante que se enfoque la atención a este problema que puede crecer debido entre otras cosas a los frentes fríos que azotan actualmente al país”, señaló.
Así, dijo que sería lamentable que al no medir correctamente el crecimiento de esta enfermedad, pudiera acontecer algo parecido a lo del 2009, en donde la pandemia de la Influenza obligó a los gobiernos a tomar medidas extraordinarias como el cierre de negocios y el encapsulamiento de muchas zonas comerciales y de reunión social.
“No es momento de tapar cifras o regatear apoyo médico a las comunidades, el gobierno federal debe informar si contamos con el medicamento suficiente para hacer frente a este virus, cuyos efectos han sido devastadores, el claro ejemplo fue el 2009”, concluyó.