La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, entregó hoy las Llaves de Oro de la ciudad al presidente de México, Enrique Peña Nieto, quien agradeció la “gran distinción” durante un acto enmarcado en la visita de Estado a España que empezó hoy lunes.
En un discurso en el salón de plenos municipal, Botella destacó los vínculos de amistad históricos, lingüísticos, culturales y económicos tanto entre España y México como entre las capitales de ambos países.
La alcaldesa de Madrid, que es la esposa del expresidente del Gobierno español José María Aznar, resaltó que México es un país “entrañablemente querido” por los españoles y, tras agradecer la visita de Peña Nieto, mostró su deseo de que esta contribuya a estrechar la colaboración entre ambos países “en un mundo crecientemente global”.
Subrayó la vocación iberoamericana de Madrid y el atractivo de México para las empresas españolas como “excelente socio” para sus negocios y aplaudió las reformas acometidas por Peña Nieto, al que deseó éxito en el futuro.
El presidente de México destacó la relevancia cultural y la influencia de Madrid en España e Iberoamérica y anunciado que, por ello, México decidió iniciar en la plaza de Colón – una de las más conocidas de la capital española – el lanzamiento de una campaña de promoción turística en todo el mundo.
Peña Nieto aseguró que la llave de oro que “generosamente” se le entregó hoy reafirma la “hermandad” y es símbolo del “prometedor futuro” que se abre para las sociedades de México y España.
Antes del acto oficial en el Ayuntamiento de Madrid, un grupo de unas veinte personas ataviadas con carteles se concentró en las inmediaciones para protestar contra las políticas de Peña Nieto, al que calificaron de “asesino” a voz en grito cuando este ha llegado a la zona.
Ya por la mañana un par de jóvenes intentaron interrumpir a voces un discurso del presidente ante un auditorio de empresarios, pero fueron rápidamente alejados por los servicios de seguridad.