“¿Hasta qué punto debemos invadir México?”, fue la declaración de un alto funcionario del equipo de transición de Trump a la revista Rolling Stone.
De acuerdo a una fuente cercana al equipo del presidente electo, Estados Unidos evalúa una “invasión suave” a México. Dicha estrategia de seguridad consistiría en desplegar fuerzas especiales estadounidenses de manera encubierta para asesinar a los líderes del narcotráfico; plan preliminar que el magnate aceptó en conversaciones privadas este año.
Seis republicanos han mencionado el tema al magnate, según el medio. En ese sentido, el plan incluiría ataques con aviones no tripulados contra la infraestructura de los cárteles o, en otras palabras, los laboratorios de drogas, el envío de entrenadores y “asesores” militares, la presencia de equipos de exterminio; una guerra cibernética contra los narcotraficantes y sus redes, y que las fuerzas especiales estadounidenses realicen redadas y secuestros de figuras clave del crimen organizado.
Rolling Stone agregó que el senador republicano Marco Rubio, secretario de Estado designado por Trump, respaldó el plan de enviar tropas norteamericanas a suelo mexicano siempre que exista cooperación entre ambos gobiernos, así como que las fuerzas especiales extranjeras y los cuerpos de seguridad mexicanos trabajen coordinadamente.