El secretario general de la OTAN, Anders Fog Rasmussen, expresó hoy preocupación por las adquisiciones a Rusia de armamento pesado, incluidos tanques, por parte de grupos armados de separatistas prorrusos en el este de Ucrania.
Rasmussen señaló que el organismo aliado “tiene informes de que tanques rusos y otros vehículos armados habrían cruzado la frontera hacia el este de Ucrania”, según un comunicado.
El presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, denunció el jueves que una columna de blindados, entre los que habría tres tanques y varias piezas de artillería, cruzó la frontera desde Rusia con la región rebelde de Lugansk.
“Estoy preocupado por los informes que señalan que grupos armados prorrusos están adquiriendo armamento pesado, incluidos tanques, a Rusia”, agregó.
Igualmente señaló que, si esos informes se confirman, “serían una seria escalada de la crisis en Ucrania oriental”.
Rasmussen insistió en que sigue instando a Rusia a “completar la retirada de sus fuerzas militares de la frontera con Ucrania, a parar el flujo de armas y de combatientes en la frontera y a ejercer su influencia entre los grupos separatistas armados para que depongan las armas y renuncien a la violencia”.
El ministro del Interior ucraniano, Arsén Aválkoz, informó el jueves de que los tres tanques fueron detectados y atacados por las fuerzas leales a Kiev cuando avanzaban hacia la localidad de Górlovka.
La columna de blindados habría cruzado la frontera con Rusia a la altura del distrito de Diakovo, donde los insurgentes controlan desde la pasada semana varios puntos fronterizos.
Ucrania, al igual que EEUU y Polonia, han denunciado que mercenarios rusos, en concreto chechenes y cosacos, han cruzado la frontera para sumarse a las milicias prorrusas que combaten en las regiones rebeldes de Donetsk y Lugansk.
La OTAN, agregó, “pide a Rusia que cumpla con los compromisos alcanzados en Ginebra y coopere con el Gobierno de Ucrania para poner en práctica los planes (allí alcanzados) para la promoción de la paz, la unidad y las reformas”.