ZACATECAS.- Después de que el tren se descarrilara por segunda ocasión en menos de quince días. el obispo de la Diócesis de Zacatecas, Sigifredo Noriega Barceló, se manifestó a favor de que se saquen las vías de la ciudad para evitar accidentes.
Cuestionado por medios de comunicación sobre los dos descarrilamientos ocurridos en los últimos quince días, el obispo aseguró que los accidentes siempre dejan una lección, y los recientemente ocurridos son la advertencia para que ya se realicen los cambios que exige el crecimiento de la ciudad.
Sigifredo Noriega expresó que las autoridades deben aprender la lección y concretar los proyectos existentes para trasladar las vías a otros puntos de la ciudad, y “ya que se avecinan tiempos electorales, es una buena oportunidad para una buena promesa”.
“Dos accidentes en una semana no son casualidad, sino que es una advertencia y la ciudad pide movimientos que son caros, pero vale la pena la protección de toda vida humana”: Sigifredo Noriega.
En otras cuestiones, dio a conocer que la institución familiar pasa tiempos críticos ya que es afectada por los cambios culturales y se constituyen en bases menos sólidas.
Y aunque Noriega Barceló aseguró que es la economía un factor para que las familias se dividan, dijo estar seguro de que existen posibilidades de salir de la pobreza, no netamente en lo comercial, sino en la visión y en la búsqueda de nuevas oportunidades.