Funcionarios de hospitales donde son atendidas las múltiples víctimas que dejó un incendio provocado en un albergue en Guatemala dijeron el jueves que la cifra de niñas muertas aumentó a 30.
Las menores fallecieron durante la madrugada en dos diferentes nosocomios a donde habían sido trasladadas desde el albergue Hogar Seguro Virgen de la Asunción, situado a unos 25 kilómetros al sureste de Ciudad de Guatemala.
Entre gritos y llantos, decenas de familiares arribaron a las puertas del Hogar Seguro Virgen de la Asunción en San José Pinula, unos 25 kilómetros al sureste de Ciudad de Guatemala, buscando información sobre sus hijos.
El jefe de la policía local, Nery Ramos, confirmó inicialmente que al menos 19 menores habían fallecido, pero más tarde hospitales locales, que habían reportado alrededor de 40 heridos de diversa consideración, informaron el deceso de dos niñas más.
“Es sumamente grave lo que ha ocurrido y más grave aún por el hecho de que pudo haberse evitado”, dijo Anabella Morfín, procuradora general de la nación, en una conferencia de prensa.
La noche anterior, decenas de menores trataron de escapar por las “malas condiciones y maltrato” tras una revuelta interna, que dejó destrozos y a una menor con lesiones. La policía dijo que logró devolver al centro a 54 de ellos, pero todavía no está claro si ambos eventos están relacionados.
En el momento de la tragedia, unos 580 menores de 18 años – con historiales que van desde el maltrato familiar, la explotación sexual y la discapacidad a delitos de hurto, agresiones y adicción- residían en el centro que depende de la Secretaría de Bienestar Social.
El año pasado, el hogar llegó a superar los 700 internados, dijeron las autoridades nacionales.Guatemala tiene la tasa más alta de desnutrición infantil de América Latina y los niños son frecuentes víctimas de explotación sexual, trabajos forzados e incluso son reclutados por grupos criminales.