Minera Peñasquito recibió en sus instalaciones a más de trescientos niños y niñas, quienes fueron invitados a participar en el STOP Kids, un programa de Seguridad a Través de la Observación Preventiva.
El propósito fundamental fue trasmitir a los pequeños las políticas de seguridad como uno de los pilares más importantes de Goldcorp, y que sean ellos quienes motiven a sus padres a regresar a casa tal y como salen de ella.
Los invitados quiénes entusiasmados viajaron desde Zacatecas, Saltillo, San Luis Potosí, Durango, y Torreón, se reunieron con la gran mayoría provenientes de las comunidades aledañas al proyecto minero, que los esperaban ansiosos en la cancha de futbol para realizar la primera actividad que consistió en formar el acróstico de este programa de seguridad para tomar una foto que recordara el momento, mientras que la alegría y las sonrisas de los niños eran video grabados mediante un dirigible dónde pudieron apreciar y aprender el ciclo de seguridad STOP que comienza con decidir, parar, observar, pensar y actuar.
El Gerente General de Minera Peñasquito, Jesús Gutiérrez resalto el interés de la empresa al compartir este tema pues dijo, en cualquier lugar nos puede pasar un incidente, en nuestra casa, en nuestro trabajo, en la carretera, en un viaje, y agregó que una mina es un lugar donde hay riesgos, así que es muy importante estar preparados para que nadie sufra un accidente y que lleguemos a nuestros casas, sanos y completos porque esa es una prioridad para nosotros.
Por su parte el Gerente de Seguridad y Salud, Dave Cartner expresó su beneplácito por la respuesta a esta invitación donde los asistentes tuvieron la oportunidad de ver el lugar dónde trabajan su papá o mamá, y de conocer además el ambiente de seguridad que compartimos con ustedes para que lo lleven también a sus hogares, pues el Stop Kids agregó, es un programa enfocado a la seguridad en nuestras familias.
El toque emotivo del evento fue orquestado por el representante de la sección 304 del SNTMMSSRM, Mauricio Monsalvo quien invitó a los niños a que se tomaran las manos, y al unisono agradecieran a sus padres por el esfuerzo que implica trabajar en una mina.
Los pequeños fueron invitados a visitar a sus familiares en su lugar de trabajo, dónde fueron recibidos por veinte “Gigantes”, los Komatsu 930 que pararon operaciones para darles la bienvenida. En este sitio y a nombre de todas las familias el niño Leonardo les agradeció su ardua labor y los invitó a comprometerse con su seguridad y la de sus seres queridos.
Finalmente plasmaron sus manitas en el muro del compromiso, ubicado en el trayecto principal al campamento, mismo que será el recordatorio permanente para ser “Suficientemente Seguros para Nuestras Familias”.