Zacatecas para los zacatecanos
*Geovanna Bañuelos de la Torre
En política siempre existirán posturas diferentes sobre el entorno social. Para quienes gobiernan y los partidos que los representan, la tarea es servir a la sociedad. A quienes estamos en la oposición nos toca vigilar, debatir y exponer con seriedad, y fundamento.
Convencida de que en la democracia el disentimiento nos fortalece, quienes estamos desde otra trinchera, tenemos la obligación moral de ser congruentes para dar voz a las injusticias, excesos y omisiones del poder. Hoy en el Partido del Trabajo, es nuestro deber señalar los equívocos y hierros de nuestros gobernantes.
Además, celebro que en su momento –aunque con diferentes posturas y visiones-, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y Movimiento Ciudadano (MC), alzáramos la voz para respaldar a los presidentes la Cámara Nacional del Comercio en Zacatecas (Canacozac), la Cámara Nacional del Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) y la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) ante sus reclamos en la falta de inclusión de sus proyectos.
Coincidentemente, la administración estatal a través de la secretaría de Economía Patricia Salinas Alatorre días después da a conocer públicamente la aprobación de proyectos a seis empresas vinculadas al Clúster Minero de Zacatecas a través del Instituto Nacional de Emprendedores (Inadem). Sin embargo, esto no fue suficiente ante la ola de críticas, una semana después, el propio gobernador Miguel Alonso Reyes se reúne con los líderes empresariales y “coinciden” en “trabajar en armonía” por “un bien común”.
Todos estos eventos tienen una lectura: la administración estatal exhibe su falta de sensibilidad ante la situación actual de nuestra entidad y por otra parte, la incapacidad de la titular de la Secretaría de Economía ante esta problemática.
El Inadem organismo dependiente de la Secretaría de Economía del Gobierno Federal, refiere tres sectores claves de nuestro estado: turístico, metalmecánico y agroindustrial. En cada sector se presentan estadísticas sobre la calidad del empleo, productividad, remuneración y el valor agregado que se les da a los insumos o productos hasta transformarlos en productos finales. (https://www.inadem.gob.mx/sectores_estrategicos.html)
Sin embargo, es preocupante que en el sector agroindustrial, la calidad del empleo es tan baja, como la productividad, remuneración y los pocos trabajadores en este ramo. Por ejemplo, en el sector turístico hay cerca de seis mil empleados, en metalmecánica son 12 mil y en el sector agroindustrial 4 mil 426.
Por otro lado, los sectores del futuro para nuestro estado, según el Inadem, son tecnología de la información, minería y automotrices. En estos dos últimos rubros, se ha invertido pero no existe un impacto o beneficio social real.
En el Plan Estatal de Desarrollo 2011-2016 promete que “las acciones de gobierno estarán orientadas a consolidar el desarrollo humano del estado”. Sin embargo es una meta que no ha logrado a tres años de gobierno.
En el apartado “Zacatecas Productivo”, reconoce que los turistas están en promedio 1.3 noches en nuestro estado y que la ocupación hotelera en promedio es del 44 por ciento. Por otro lado, en la industria manufacturera, ocupa el séptimo lugar entre las entidades federativas con menos actividad y se sitúa por arriba del agropecuario y por debajo de la minería, comercio y servicios inmobiliarios. Estas estadísticas no han sufrido cambio alguno, lo que significa que existe un estancamiento en esos rubros.
Más adelante el Plan Estatal de Desarrollo propone: “Apoyaremos la consolidación de la economía social en el estado, como herramienta de impulso tanto para el desarrollo económico para la construcción de la democracia participativa”. Como se observa, es un documento con signos contradictorios, pues “la democracia participativa” es del ámbito político y “el desarrollo económico” se refiere al bienestar común.
El documento está plagado de buenas intenciones. Propone apoyar al sector artesanal, comercializar los productos agropecuarios y modernizar el campo, respetando el medio ambiente e incluso elevar la producción para dar valor agregado a los productos. Además sugiere “estudios de mercado, tendencias del consumidor y hábitos de compra”. Todo lo anterior, es un discurso sin concretar.
Ante el casi nulo crecimiento económico en el país que afecta directamente a nuestro estado, existe otro factor determinante: la ausencia de políticas públicas eficaces en el ramo económico, social, educativo y de seguridad.
En los cuatro puntos cardinales se asoma la pobreza, un campo desolado, jóvenes olvidados, carencia de empleos, poco crecimiento y bienestar social. Aunado a esto, la improvisación y poca madurez política no han logrado trazar el camino para el desarrollo.
Si Alonso Reyes no quiere ser recordado como un gobernante de poca visión y sin compromiso con los zacatecanos, debe escuchar a todos los sectores de la sociedad.
No se gobierna con eventos festivos y sociales, con más equipo de seguridad y armamento o con viajes. Para gobernar, se necesita escuchar con humildad y tener una visión clara para delinear un futuro promisorio.
¡Zacatecas para los zacatecanos!