Este mes entró en vigor la nueva Ley de Educación del estado de Zacatecas, documentó que causó críticas, manifestaciones y un malestar que no ha dejado de hacerse sentir en la entidad.
Por Bernardo Hernández / Pórtico Online
Una de las novedades de esta ley es que busca asegurar la participación activa de todas las personas involucradas en el proceso educativo y en especial los padres de familia con la legalización de las donaciones en “numerario”.
Para ello se contempla la figura de las donaciones voluntarias, aportaciones que serán establecidas por las autoridades educativas.
La ley dice que se prohíbe el pago de cualquier contraprestación que impida o condicione la prestación del servicio a los educandos; la realidad, según diputados locales, maestros disidentes y líderes de organizaciones civiles es que estos donativos no son sino contraprestaciones disfrazadas.
Una de las funciones de las sociedades de padres de familia será la aplicación de cooperación en numerario (dinero en efectivo), bienes y servicios que, en su caso, han las propias asociaciones al establecimiento escolar.
Estas cooperaciones serán de carácter voluntario y, de acuerdo con el documento, en ningún caso se entenderán como contraprestaciones del servicio educativo.
Otra de las novedades de la norma es que los ayuntamientos deberán ponerle dinero al sistema educativo estatal.
Los municipios invertirán recursos económicos que no serán transferibles y deberán aplicarse en la prestación de servicios, programas, proyectos y actividades educativas.
En términos de evaluación, las autoridades estatales entregan la potestad al Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE).
Para ejercer la docencia en instituciones establecidas por el Estado, los maestros deberán satisfacer los requisitos que, en su caso, señalen las autoridades competentes, es decir, los lineamientos emitidos por el INEE.
Esta oficina se encargará de emitir las directrices relevantes para mejorar la calidad de la educación en el estado con base en los resultados de la evaluación. Una de esas directrices se refiere a definir la permanencia de los docentes frente a grupo.
La asignación de plazas, según la ley educativa, se hará conforme a los puntajes obtenidos, de mayor a menor, por quienes participen en los concursos organizados por la secretaría de educación zacatecana, que se harán, de preferencia, de forma anual.
Los docentes estarán obligados a colaborar en las evaluaciones internas que se hagan para mejorar la práctica profesional.