Un análisis del portal Sin embargo.mx ubica a los dos municipios de la zona conurbada en la lista de los 15 municipios del país con las mayores tasas de feminicidios.
Por Bernardo Hernández para Pórtico Online
El portal utilizó información del INEGI para elaborar la relación de asesinatos dolosos de personas del sexo femenino por cada 100 mil mujeres en poblaciones de todo el país.
La capital zacatecana ocupa el noveno lugar de la tabla de feminicidios con una tasa que en 2012 fue de 13.5 asesinatos por cada 100 mil zacatecanas.
Guadalupe entró en el lugar quince con 10 homicidios dolosos de mujeres por cada 100 mil mujeres en el año de referencia.
El primer lugar fue para Acapulco, en el estado de Guerrero, con una tasa de 29.9 homicidios.
El estado de Chihuahua aportó cinco municipios a la lista, Tamaulipas, Guerrero y Zacatecas aportaron dos poblados cada uno, Durango, Coahuila, Estado de México y Nuevo León están representados con una demarcación.
En la lista del mapa denominado como Las quince mejores ciudades para ser mujer se destacaron Cuautitlán (Estado de México), Minatitlán (Veracruz) y San Luis Río Colorado (Sonora), con ningún feminicidio registrado en 2012.
Los 13.5 asesinatos por cada 100 mil zacatecanas de 2012 bastaron para colocar a Zacatecas como la segunda peor capital para las mujeres.
El primer sitio le corresponde a Monterrey, Nuevo León. La diferencia entre la tasa de la capital regia y la zacatecana es de apenas una décima.
Por debajo de Zacatecas quedaron capitales como Chihuahua, Tampico, Durango o Cuernavaca.
La figura del feminicidio se incluyó en la legislación zacatecana desde agosto de 2012. En el tiempo transcurrido desde la reforma al Código Penal del estado, la Procuraduría General de Justicia no ha registrado con ese concepto ningún asesinato de mujeres.
La publicación por parte de Sinembargo.mx coincide con eventos que parecen darle la razón a su análisis: la desaparición de Angélica María Robles, agente de tránsito y madre de una hija que tiene más de un año desaparecida.
En sus declaraciones sobre el caso, el procurador estatal, Arturo Nahle, reconoció que no tienen pistas sobre el paradero de la trabajadora estatal.