Un penoso caso se liberó en redes sociales. La publicación de un video en la red social facebook sacó tanto lo mejor como lo peor de la sociedad zacatecana.
Por Bernardo Hernández para Pórtico Online.
Los protagonistas son jóvenes menores de edad. La más pequeña tiene, cuando mucho, trece años de edad.
Los casi cuatro minutos de duración no dejan mucho a la imaginación. Un caso de venganza que va más allá del bullying con el que se pretende definir a la acción.
“Híncate, humillaste a toda la gente, (…) híncate y pídeles perdón”, eso y las risas, y luego “Andrea, no la golpees”, “No quiero que te vuelvas a meter con nadie, estúpida”, y el “ya, por favor ya”, bastan como resumen del argumento.
La historia que es posible reconstruir a partir de los comentarios vertidos en redes sociales por decenas de zacatecanos –el video generó más de 400 comentarios en apenas dos horas tan solo en uno de los muros en los que fue colgado- es la siguiente:
Una joven de nombre Andrea Garibay, estudiante del Cobaez fue la autora intelectual y material. La que es forzada a hincarse también se llama Andrea, su apellido es García.
El problema comenzó en una red social, ask.fm, un sitio de preguntas y respuestas en el que Andrea R. García vertió comentarios ofensivos en contra de otros usuarios.
El pasado 15 de mayo, Andrea Garibay utilizó las redes para dar con esa niña de entre 12 y 13 años. Con ayuda de un par de compañeros la llevó a un terreno baldío y ahí se realizó la filmación. Luego, anunció en facebook que daría a conocer el resultado de su acto justiciero.
Y ahora las redes sociales se han vuelto en contra suya.
Entre los mensajes que se han subido a las redes unos se limitan a pedir la intervención de las autoridades, otros piden un castigo ejemplar para Andrea Garibay y para quienes participaron en la filmación, muchos más son insultos de variada extensión o amenazas en contra de la joven. También han circulado fotos de la estudiante de bachilleres a las que ha sido anexada la leyenda: “No sabes con quien te metes”.
Las cuentas de la ofendida agresora y su infantil difamadora han sido inhabilitadas.
No obstante, en el portal de ask.fm todavía es posible encontrar muestras de la limitada celebridad alcanzada por Andrea R. García gracias a sus comentarios.