En las últimas semanas el kilogramo de huevo se ha vendido hasta en 46 pesos en el norte del país, mientras que en la Ciudad de México se registra en 40 pesos.
El gobierno capitalino asegura que no hay motivo para incrementar el precio porque hay suficiente producción que garantizará la demanda nacional.
Los productores lo atribuyen a la temporada de cuaresma, mientras que comerciantes de la central de abasto señalan que sus ventas disminuyeron cinco por ciento y piden a la población acudir con ellos donde el precio oscila entre 30 y 32 pesos.