Por tanto el hombre dejará a su padre y a su madre y se unirá a su mujer, y serán una sola carne. Génesis 2:24.
ZACATECAS.- Desde muy temprana edad e influenciadas por la cultura y los medios de comunicación, la mayoría de las niñas fijan su mirada en los cuentos de hadas que definen el verdadero amor con el matrimonio “para toda la vida”, sin embargo, las altas cifras de embarazos en adolescentes, la violencia y adicciones en jóvenes reflejan una inminente descomposición social que comienza en el núcleo familiar.
En el 2014, se igualó la cifra de matrimonios y divorcios que fue de 500. En lo que va de 2015, tan solo en la capital se han registrado 230 matrimonios y 97 disoluciones de vínculos matrimoniales.
“En estos tiempos el matrimonio se disuelve fácil y rápidamente, un hecho que entristece”, asegura Rafael Pedroza Hornedo, oficial primero del Registro Civil del ayuntamiento capitalino, quien en 28 años de experiencia ha sido testigo de que los enlaces matrimoniales han perdido su valor y ya no duran “hasta que la muerte los separe”.
Asimismo, Pedroza Hornedo dejó en claro su postura personal y como juez ante las uniones del mismo sexo: “esos no son matrimonios, el matrimonio es la unión entre un hombre y una mujer” y expresó su desagrado a que un juez federal ordene la aprobación de un enlace entre homosexuales o lesbianas, “no es posible que un magistrado, estando tan preparado no conozca la definición de matrimonio”, aseguró.
El diccionario de la Real Academia de la Lengua Española define el matrimonio como la unión de hombre y mujer concertada mediante determinados ritos o formalidades legales.
El origen etimológico de la palabra matrimonio como denominación de la institución bajo ese nombre no es claro. Se suele derivar de la expresión “matris munium” proveniente de dos palabras del latín: la primera “matris”, que significa “madre” y, la segunda, “munium”, “gravamen o cuidado”, viniendo a significar “cuidado de la madre por el marido/padre”.
Rafael Pedroza Hornedo aseguró que estas nuevas ideas provienen de una descomposición social “donde todos hacen lo que quieren”. Ahora los jóvenes operan al contrario, ya no quieren un compromiso, solo quieren satisfacer sus deseos y si la relación no funciona la anulan rápidamente
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), al 2012 se registraron 585 mil 434 matrimonios, en 2011 fueron 570 mil 954 y en 2010 fueron 568 mil 632.
A partir de 2009, en el Distrito Federal se legalizaron los matrimonios entre personas del mismo sexo, por lo que en 2010 se realizaron 689 enlaces, en 2011 fueron 802 y en 2012 se registraron 936.
En los últimos años, el número de divorcios en México se incrementó considerablemente.
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En 1980 por cada 100 matrimonios había 4 divorcios; en 1990 y 2000 esta cifra se elevó a poco más de 7 divorcios, para 2005 el número de divorcios por cada 100 matrimonios fue de casi 12 y al 2012 fue de 17 divorcios por cada 100 matrimonios.
