El presidente municipal de Guadalupe, Julio César Chávez Padilla recordó que más de 307 millones de pesos de deuda, es la que la administración de Enrique Flores y Samuel Díaz ocasionaron al municipio de Guadalupe ante instancias federales, y que, en conjunto, los adeudos ante el IMSS y el SAT representan más de 70 meses de inversión de obras en favor de las familias guadalupenses.
En este sentido, dijo, el riesgo latente de las futuras acciones de retención u obligación de pago, tanto del SAT como del IMSS, dadas las omisiones de Enrique Flores Mendoza y Samuel Díaz Soto, ponen en peligro no solo el salario de los más de 1 mil 800 trabajadores del municipio, sino todas las acciones para el desarrollo de la ciudad de Guadalupe y sus más de 215 mil habitantes.
En un mensaje emitido en sus redes sociales, Chávez Padilla enfatizó que “al margen de la ley, nada, por encima de la ley, nadie, es un anhelo, no una realidad que hoy buscamos”.
Advirtió que “ni por comodidad de unos cuantos de la antigua cúpula del poder, ni por intimidación, vamos a dejar de actuar”.
Al margen de la ley, nada, por encima de la ley, nadie, es una realidad que aún no alcanzamos, pero buscamos incansablemente, añadió.
Chávez Padilla, afirmó que no tolerará ningún acto de saqueo o corrupción que afecte a las arcas municipales ni al pueblo de Guadalupe, al tiempo que lamentó la impunidad que prevalece en las instancias encargadas de impartir justicia.
Recordó que de mayo de 2017 y hasta agosto de 2018, los exalcaldes de Guadalupe, Enrique Flores Mendoza y Samuel Díaz Soto, realizaron retenciones de ISR al salario de los trabajadores del Ayuntamiento, sin reportar dicho recurso al Servicio de Administración Tributaria (SAT), generando una deuda para el municipio de Guadalupe de 142 millones 600 mil pesos.
También por concepto de retenciones aplicadas a las percepciones de los servidores públicos de junio de 2017 a agosto de 2018, pero no enteradas al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), por lo que Enrique Flores y Samuel Díaz con sus respectivos equipos de trabajo generaron a el municipio de Guadalupe una deuda que rebasa los 164 millones de pesos.