Código político
La matanza de policías
Por Juan Gómez
Antonio Soledad Martínez Pérez tomó posesión de la Dirección de Seguridad del municipio de Fresnillo, el 15 de mayo, 199 días después sería emboscado en el Paseo del Mineral junto con su escolta, quien también murió en el fuego cruzado, escenario dramático en el que también murió un civil.
El pasado 15 de diciembre, Alejandro Pozos, fue designado por el cabildo del ayuntamiento de Fresnillo, como director de Seguridad Pública municipal y al siguiente día, en el municipio de Calera, sería asesinado un elemento de la Policía Estatal.
Diciembre ha sido un mes fatal para los policías zacatecanos. El pasado siete de este mes, fue ejecutado el director de Seguridad del Centro de Readaptación Social de Cieneguillas, Zacatecas, Pablo Arteaga Córdoba, en las inmediaciones de su domicilio ubicado en la colonia Villa Fontana, en Guadalupe, Zacatecas, cuando abordaba su vehículo.
Hasta este domingo 17 de diciembre del año 2023 han sido asesinados 32 elementos policíacos en el estado de Zacatecas, mientras que el año pasado fueron ultimados 60, de acuerdo a datos de la organización civil Causa en Común.
Zacatecas ocupa el tercer lugar nacional en cuanto al registro de asesinatos de agentes de seguridad, el primer lugar lo ocupa Guanajuato con 59 y el segundo sitio, Guerrero con 39.
En lo que va del año han sido asesinados 403 policías en el país, mientras que el año pasado mataron a 403, la misma cantidad.
En el estado de Zacatecas las ejecuciones que ha hecho la delincuencia organizada son quirúrgicas y tienen un mensaje muy claro, demandan impunidad, protección para poder operar la industria del terror.
Todo este escenario se da en un ambiente de debilitamiento institucional, de ocultamiento de más crímenes cometidos en distintos municipios, sobre todo en la zona conurbada Guadalupe-Zacatecas, que se ha convertido en una zona roja en la que se generan homicidios que no son reportados.
Dicho debilitamiento institucional repercute seriamente en las instancias de procuración de justicia, de protección ciudadana y de reacción inmediata, de ataque a los generadores de violencia y de reclusión de elementos delictivos.
El gobierno de David Monreal cierra este año en un escenario muy adverso que muestra una grieta que se ensancha en la Fiscalía General de Justicia del estado, con una Secretaría de Seguridad Pública rebasada por la delincuencia organizada y con una policía municipal indefensa, sin adiestramiento para poder enfrentar o evadir, en su caso, las agresiones de los generadores de violencia.
El gobierno morenista ha sido incapaz de frenar la escalada de violencia en el estado, debido a la falta de una estrategia que prevea, contenga y contrarreste los embates agresivos, violentos de la delincuencia organizada.
El 24 de febrero el mandatario estatal dio a conocer la Estrategia Estatal para la Construcción de Paz, Prevención y Convivencia Ciudadana, en la que delineó tres objetivos y 10 estrategias, “para lograr un Zacatecas con tranquilidad, porque somos más los que queremos una tierra de paz y progreso”.
Diez meses después, no se ha dado conocer una evaluación del avance de dichos objetivos y de las estrategias.
El próximo año no se avizora halagüeño debido a los siguientes factores: se carece de una evaluación de los planes y estrategias contra la seguridad; no hay suficiencia presupuestaria para las instancias de procuración de justicia y protección ciudadana y además, el recorte de la federación afectará transversalmente a las políticas públicas gubernamentales.
Además de todo este escenario, el 2024 es año electoral y por tanto, los cárteles de la violencia presionarán fuerte para influir en el proceso electoral y preservar y ensanchar su presencia en los municipios, para aumentar su control en las áreas de ingreso económico.
También mandarán sus mensajes de violencia a las candidaturas presidenciales.
Al tiempo.
@juangomezac