Miles de zacatecanas invadieron las principales calles del Centro Histórico de Zacatecas y se enfrentaron a una estrategia represiva del gobierno morenista de David Monreal, quien utilizó cuerpos antimotines para agredir a algunas marchistas y detener a un número indeterminado de jóvenes participantes en la marcha conmemorativa del Día Internacional de la Mujer que desbordó a la Plaza de Armas.
Las marchistas gritaron una serie de consignas y portaban carteles –“Vivas nos queremos”; “Este día no es de fiesta, es de protesta”; “Los niños no se tocan”- en demanda de justicia ante desapariciones, violaciones, tocamientos sexuales, acoso laboral, y evidenciaban la impunidad prevaleciente en los órganos impartidores de justicia.
La marcha inició ordenadamente a las tres de la tarde y minutos después de las cuagro ya estaban arribando miles de mujeres, entre las que destacaban madres y familiares de desaparecidas y desaparecidos, quienes llevaban un lienzo rojo tejido con sus manos. También un contingente de discapacitados marchó junto con el grueso de los contingentes.
Al llegar a Palacio de Gobierno un grupo de mujeres vestidas de negro intentó cruzar el cerco blindado por vallas metálicas y resguardado por mujeres y elementos policíacos, lo que generó un enfrentamiento y la detención de algunas de las marchistas, ante lo cual el gobierno no ha dado a conocer su estado jurídico y tampoco el número de féminas detenidas.
Un sector de las marchistas pintarrajearon y quebraron los vidrios de algunos comercios zacatecanos, lo que indignó a comerciantes.
La concentración de la marcha conmemorativa del Día Internacional de la Mujer de este ocho de marzo, es la de mayor participación, y se distinguirá también por la estrategia represiva del gobierno del estado de Zacatecas.
Detuvieron a la reportera Nayeli de León, a quien la soltaron cuando les dijo que era prensa, pero ya la habían golpeado, indicó Emilia Pecy, quien señaló que la reportera Nancy García fue detenida, al igual que Flor de Defensoras Digitales.