La Misión de Naciones Unidas en Irak (UNAMI) informó que la violencia insurgente cobró el mes pasado la vida de más de dos mil 600 iraquíes y dejó más de dos mil 300 heridos.
“La última vez que un número similar de personas murieron en Irak solamente en un mes fue en 2007”, dijo en rueda de prensa la portavoz de la oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para Derechos Humanos (ACNUDH), Ravina Shamdasani.
En junio murieron mil 531 civiles, más 886 miembros de las fuerzas armadas, además de 244 asesinados en la provincia de Anbar, detalló.
Asimismo otros mil 763 civiles resultaron heridos por la fuerte ofensiva del grupo extremista Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL).
Además de unos 588 civiles heridos en Anbar en donde el ACNUDH por falta de presencia en esa zona no pudo corroborar las cifras proporcionadas por el gobierno.
“Condenamos en los términos más enérgicos este recrudecimiento de la violencia y los asesinatos. El derecho internacional exige a las partes en el conflicto a tomar todas las medidas posibles para garantizar que los civiles estén protegidos de la violencia”, señaló.
No obstante, “estamos recibiendo constantemente informes de civiles secuestrados, acosados y asesinados por las fuerzas de EIIL y de los bombardeos indiscriminados de zonas civiles”, deploró.
“También hemos recibido informes de que las fuerzas de EIIL han ido de puerta en puerta en Mosul tratando de reclutar a la fuerza a los jóvenes a luchar contra la ISF”.
“Instamos a todas las partes en el conflicto a que respeten el derecho internacional de los derechos humanos y el derecho internacional humanitario y llamamos a las autoridades iraquíes para hacer rendir cuentas a los responsables de tales violaciones”, instó ACNUDH.
