Información por: Rocío Pedroza.
ZACATECAS.- Con incontenibles lágrimas de una joven esposa y el reclamo de un padre al ver su confianza traicionada por parte del director de la Unidad de Ciencias de la Tierra de la Universidad Autónoma de Zacatecas, familiares del destacado estudiante que fue detenido el 1 de junio en el país vecino de Nicaragua hicieron pública su genuina tristeza por la situación legal que enfrenta Jobany Torres Becerra.
“Yo le di la confianza al director, él es culpable porque uno les da la confianza para que estudien y se preparen. Ahora él no me da razón de nada”, expresó en conferencia de prensa Cruz Torres Ramírez, padre del joven y quien dijo dedicarse a la agricultura.
La esposa de Jobany, Guadalupe Itzamary Robles Rodríguez, de 22 años de edad, dirigió entre sollozos unas palabras a la prensa zacatecana:
“Yo pido su ayuda para tener una respuesta de él. Yo como su esposa lo echo más que de menos. Quiero saber por qué lo tienen detenido y por qué está pasando por esta situación”.
Asimismo, la mujer del joven aseguró que fue desde el 1 de junio que perdió comunicación con su esposo, quien viajó a Nicaragua para hacer sus prácticas profesionales, luego de haber cursado la carrera de Ingeniero Minero Metalurgista con un promedio de excelencia de 9.3.
“Mis respetos, él es uno de los estudiantes que se enfoca en lo que está haciendo, yo lo admiro ” y enseguida muestra su constancia de calificaciones.
“Por eso yo no lo puedo acusar de otras cosas, yo sé que está enfocado en sus estudios. Yo al menos quisiera escucharlo que está bien”.
Refirió también que el 26 de mayo durante una llamada telefónica Jobany le expresaba que se sentía muy mal, que lo habían amenazado y quería estar ya cerca de su familia, en su comunidad.
Sin embargo, llama la atención que un día después, el 27 de mayo, al momento en el que ella le insistió una explicación del porqué de su malestar y de parte de quién recibió las amenazas, su esposo parece no recordar la plática y le asegura que él no había dicho nada.
Al cuestionarla sobre su sentir al ver las imágenes de Jobany con el tejido conjuntivo enrojecido por la ruptura de vasos sanguíneos y hematomas por contusiones en el contorno de los ojos, y con la mirada perdida, Guadalupe Itzamary aseguró que “él no puede ser Jobany” al desconocer su actitud.
La última ocasión en que habló con él, Jobany le confió que iría al aeropuerto para que le checaran sus papeles. “Después de eso no supe ya nada de él”.
El diputado migrante José Guadalupe Hernández, quien convocó a la rueda de prensa y dijo haber hablado con Jacinto José Suárez, presidente de la Comisión de Asuntos Fronterizos de Nicaragua, para exigirle información respecto a la situación legal de Jobany, ofreció su respaldo a la familia y aseguró que, de ser necesario, harían lo posible para trasladar a la familia a aquél país.
“Que nos echen la mano. Venimos de una familia pobre, no tenemos dinero ni recursos para movernos. Él no es un delincuente, es un estudiante”, expresó el padre de Jobany.
Su esposa y el hermano de Jobany, Juan Carlos, aseguraron que sería imposible, “porque lo conocen”, que éste haya simulado su desaparición y se haya golpeado con los puños, como lo haya declarado la fiscal Giselle Borge Zeledón lo acusó por simulación de delito, situación que causó tensión nacional e internacional.
En un video difundido por la prensa de Nicaragua, Jobany Torres Becerra pidió perdón por lo que hizo en un estado de visible nerviosismo luego de la primera audiencia preliminar donde se le acusó de simulación de desaparición.
Torres Becerra fue aprehendido el pasado 1 de junio en el aeropuerto Augusto César Sandino de la capital de Nicaragua, luego que la empresa donde hacía un periodo de pasantía, minera Hemco, denunciara su presunta desaparición el día 31 de mayo.
Aun cuando han mediado autoridades mexicanas de la Secretaría de Relaciones Exteriores para su presentación y repatriación, no se le había visto hasta ayer 13 de junio en que según registraron diferentes medios de comunicación, entre ellos La Prensa, periódico nicaragüense, compareció ante el juez quinto de Managua, Walter William.
Según la fiscalía nicaragüense, la conducta del joven originario de Casa Blanca, localidad del municipio de Guadalupe, se enmarca en la presunción del artículo 473 del Código Penal de aquel país, esto es, la simulación ante autoridad competente de ser víctima de un delito o denunciar la existencia de éste en falso.
La fiscal Borge Zeledón dio cuenta que la presunta motivación de Torres Becerra para intentar su salida del país sin informarlo a la empresa minera y compañeros, era la de “desprestigiar la labor que realiza el gobierno de la reconciliación de mantener la seguridad en el país”, por lo que habría aparentado su desaparición, “y dijo había sido víctima de la delincuencia”, por lo que se le mantendrá en prisión preventiva hasta el 27 de junio próximo, fecha de una nueva audiencia.
Según el Código Penal nicaragüense para los delitos que se le imputan a Jobany Torres Becerra, se imponen “100 a 200 días de multa”.
Al final de la conferencia, Juan Carlos Torres Becerra, hermano de Jobany, informó que él ya había tenido comunicación con él, sin embargo, sus respuestas fueron ambiguas y poco creíbles para él luego de haber visto las imágenes donde aparece con los ojos rojos. “-¿Te golpearon?- Narra que le preguntó y su contestación fue un no. Asimismo, refirió que el gobernador Miguel Alonso Reyes le ofreció su respaldo.
A la conferencia de prensa también asistió Rosa María Rodríguez Almaraz, madre de Guadalupe Itzamary, quien también se mostraba preocupada y sin evitarlo, constantemente soltaba el llanto.