De entrada comentó que “el asunto no es tan sencillo” al referirse a la probabilidad de acertar al realizar la asociación “presidente amigo del gobernador igual a progreso para Zacatecas.”
Becerra Villegas indicó que da nada servirá la buena relación de ambos mandatarios si Zacatecas no logra consolidar una estructura que le permita un crecimiento auto sostenible, es decir, hasta que no sea capaz de producir más de lo que recibe. Así lo planteó:
Zacatecas carece de estructura propia que le permita generar un crecimiento interno, estructura compuesta de una cultura emprendedora, no en el sentido de la iniciativa privada, sino entendida como la capacidad de emprendimiento que debería tener el sector publico y académico, entre otros.
El estado deberá crear esas fortalezas que le permitan posicionarse por si mismo en mejores niveles de desarrollo que en los que se encuentra actualmente. Si no logra crecer en propia capacidad, podrá tener un ambiente suficientemente amigable en el sentido de los apoyos federales que pueda recibir, pero estos se constituirán únicamente como apoyos paliativos frente a los verdaderos problemas que Zacatecas tiene.
Factura electoral
Jesús Becerra Villegas precisó que hay una especie de factura que se quiere cobrar, luego de que Zacatecas se posicionara como el estado con el porcentaje de votación más alto para Enrique Peña Nieto del país en términos porcentuales.
Esta no es una factura a la que se le pueda sacar provecho por demasiado tiempo, aclaró Villegas, habrá consideraciones iniciales que serán oportunidades pero lo que debe seguir es que Zacatecas haga su tarea, es decir, que deje de ser un estado deficitario y comience a ser supeditario, en el sentido de que ya no dependemos de los recursos de la federación y generamos en más cantidad de la que recibimos.