Alejandra Guzmán Pineda afirma que nuestro país está en una gran crisis en todos los sectores y que se requiere de esperanza, “de valor y de sacar el espíritu para construir y trabajar diario para esta reconstrucción de un tejido social que tardará 80 años para superar la actual situación”.
Entrevistada al término del taller Liderazgo de la Mujer Centrado en Valores organizado por el voluntariado del Tribunal Superior de Justicia de Zacatecas, en el que participaron más de cien mujeres, señala que “hay una gran oportunidad si somos valientes y enfrentamos desde lo profundo lo que tenemos enfrente”.
La conferencista destacó a la congruencia como parte de una fórmula de encarar los retos de la crisis social, y especifica que “si todos agarramos nuestra parte de congruencia, esto se va reproduciendo, como cuando se lanza una piedra al agua, pero tenemos que empezar por nosotros”.
“Seamos congruentes y hacer lo que a cada quien nos toca, indicó Guzmán Pineda al mencionar que vamos a salir adelante porque la receta es la de todos los siglos.
Añade que el que es congruente es como un árbol frondoso que extiende sus ramas a todos y todo el mundo se quiere apegar a él porque debajo de él hay buena sombra, no hay de otra.
Egresada de la Universidad Nacional Autónoma de México y con una amplia trayectoria y formación en la formación de capital y desarrollo humano, Alejandra Guzmán Pineda analiza que la crisis que actualmente se vive en el país es multifactorial y que no es exclusiva de México sino que es mundial.
Agrega que dicha crisis se traduce en el pensamiento, el corazón y en la filosofía de vida y que empezamos a perder el rumbo cuando solo miramos hacia afuera, dando prioridad al factor económico entre otros aspectos y que se tradujo en una desintegración familiar, falta de valores y de comunicación.
“Se nos hizo fácil utilizar a las personas en vez de vincularnos con ellas y cuando vamos por un camino que no está fundamentado en valores existenciales, ahí están las consecuencias en nuestro país y en el mundo porque es una crisis mundial”, dijo.
Argumentó que la crisis empieza cuando empezamos a desestructuramos como familia, cuando no nos escuchamos como persona, cuando no nos tenemos respeto y valoramos más una cosa material.
Es entonces cuando empezamos abrir un vacío existencial que ahora si, se llena de todo lo demás, menos de lo valioso, puntualizó.
Destacó que “los mexicanos somos muy trabajadores pero ¿para qué estamos trabajando? ¿Solo para medios materiales? No, tenemos que trabajar para reconstruirnos nuevamente. Estamos acostumbrados a eso, pero ahora estamos en una crisis familiar también”.
Alejandra Guzmán Pineda mencionó que “todos tenemos una labor qué hacer, nuestra labor es agarrar el gancho que nos toca y desde el ámbito donde estemos, hacer lo que nos corresponde. Que cada quien haga bien lo que le toca, de eso se trata”.
Ante el panorama de crisis social que se vive actualmente Guzmán Pineda reflexiona y sostiene que el mexicano debe actuar en dos ámbitos, en el trabajo y en el estudio pero con un sentido de responsabilidad, con la familia o sea, reconstruir el vínculo con los valores espirituales, pero no en lo abstracto sino en lo concreto.
En este contexto refiere que serán necesarios, de acuerdo con algunos especialistas en el tema, 80 años para la reconstrucción del tejido social.
“Claro que hay esperanza porque siempre que hoy reparo una casa se puede reconstruir y no nos podemos quedar en la oscuridad”, comentó al respecto.
Respecto a sus impresiones sobre el panorama social de Zacatecas, Alejandra Guzmán afirmpo que “me preocupó mucho algo que no había contemplado en otros estados (del papis), de tantas mujeres solas con sus hijos”.
Sostuvo que falta la presencia masculina y que los hombres son una prioridad también en el estado.