Después de haber sido trasladados algunos comerciantes de artículos religiosos al mercado González Ortega, luego de permanecer por varios años afuera de la catedral de Zacatecas “las ventas están muertas, no sacamos ni para comer”, manifestó María de los Ángeles Medina, comerciante religioso desde hace 20 años.
Aseguró que las políticas que maneja la administración de la Junta de Monumentos Coloniales y Zonas Típicas de Zacatecas “está fuera de lugar”, pues comenta que de manera arbitraria llegó la policía municipal y les recogió toda la mercancía y les dijo que se fueran.
“yo he solicitado de manera educada al ayuntamiento capitalino que nos ayuden, soy persona mayor, tengo más de 70 años y ya no puedo trabajar, mi esposo falleció y de esto es de lo que me mantengo”, señaló la comerciante
Añadió que todos estos problemas se han originado desde la administración del alcalde capitalino Arnoldo Rodríguez Reyes, a quien más de una vez le han solicitado por medio del departamento de permisos que les sea otorgado el documento, para poder laborar en las afueras de la catedral, permiso que en reiteradas ocasiones les ha sido negado.
Las ventas “van de mal en peor, no sacamos nada, ni para tortillas, estamos desesperados porque es nuestra fuente de trabajo mía y de mi hijo y mírenos aquí sin vender”, subrayó
Algunos ciudadanos opinaron que no es justo que los hayan corrido de la catedral porque “ellos tienen años vendiendo artículos religiosos, muchos zacatecanos ya los conocemos”.
Los permisos que otorga el ayuntamiento capitalino “no están bien organizados y hay gente que ni es de aquí y les dan permiso para trabajar en donde sea”, dijo en entrevista doña Esther compradora de artículos religiosos