Bernardo Hernández/PórticoOnLine
La resistencia a denunciar ante los medios de información las malas condiciones en que desempeñan su función no evitaron que se difundiera el oficio dirigido por los custodios del penal de Cieneguillas al secretario de Seguridad Pública, Jesús Pinto Ortiz.
El documento fechado en febrero pasado no contiene novedades con respecto a los problemas que ha venido arrastrando el centro penitenciario.
Los custodios alegan que se les prometió un aumento de sueldo, primero de mil pesos, luego de un 20%, aunque ellos quisieran que se homologara su salario con el que reciben los integrantes de la Policía Estatal Preventiva.
En el oficio, sin embargo, no dejaron pasar la oportunidad de recordarle al secretario Pinto la situación de vulnerabilidad en que se encuentran los trabajadores del estado que trabajan en el área de seguridad pública.
Le recordaron que después de la desaparición de la directora Fabiola Quiroz Zárate (en agosto de 2012), el secretario fue a visitar al personal del centro de reclusión y se comprometió a remediar diversas necesidades y carencias del personal.
La lista incluye: escasez de personal, luminarias para las torres de vigilancia, armamento, parque vehicular, la ya mencionada de homologar sueldos, otorgar bases.
También hacen eco de las palabras del secretario al decirle que en el Penal de Cieneguillas Hay internos del fuero federal de alta peligrosidad y que las instalaciones zacatecanas no son adecuadas para hacerse cargo de ellos.
En el tema de la escasez de personal, los quejosos le piden al secretario que contrate a más de una veintena de personas para tener la plantilla de 60 elementos por guardia y mejorar la vigilancia.
En el centro de readaptación social los custodios abandonan sus áreas para, por ejemplo, efectuar traslados. Hay 30 elementos y dos mandos por guardia para cubrir 42 servicios y custodiar a más de 700 internos.
La imagen que ofrecen tampoco es la mejor, afirman, ya que tienen uniformes incompletos y de mala calidad, armas insuficientes, así como equipo antimotines en pésimas condiciones ya que datan de los tiempos en que Ricardo Monreal era gobernador.
Los custodios tampoco tienen chalecos antipuntas ni máscaras anti-gas. La cárcel de Cieneguillas tampoco tiene un vehículo apropiado para distribuir a su personal. Antes se usaba un minibús y ahora los amontonan en la caja de una camioneta.
Para finalizar, los custodios también quieren su día, es decir que se les festeje como se hace con los policías preventivos y con los tránsitos.