El Partido de los Trabajadores lanzó oficialmente este sábado la candidatura de la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, a la reelección en los comicios del 5 de octubre próximo.
“Está aprobada” la candidatura de Rousseff a la Presidencia, proclamó el presidente del partido, Rui Falcao, en la convención realizada en Brasilia, en un palco cubierto con estrellas rojas, símbolo del partido, y flanqueado por grandes fotos de la mandataria.
El lanzamiento de la candidatura se hizo por aclamación de unos 800 delegados, con la presencia del padrino político de Rousseff, el expresidente Luiz Inacio Lula da Silva (2003-2010), y de la propia mandataria.
“Es hora de seguir adelante, es hora de hacer más cambios, mis queridos compañeros”, dijo Rousseff tras ser proclamada.
En medio de la Copa del Mundo, el acto se convirtió en una defensa de la organización del máximo torneo del fútbol internacional y de una agenda de cambios para el próximo mandato presidencial, en clara respuesta a las protestas callejeras que irrumpieron en Brasil el año pasado contra los elevados gastos públicos para el Mundial, que muchos brasileños pretendían que se destinaran a mejores servicios públicos, y también contra la corrupción y por cambios en el sistema político.
“Tenemos Copa, pero no tendremos segunda vuelta”, “Un, dos, tres, Dilma otra vez”, gritaban los delegados, en defensa de una victoria en primera vuelta electoral.
Los delegados también aclamaron al líder máximo del partido y expresidente Lula da Silva, quien dejó el poder con 80% de popularidad: “Lula, guerrero del pueblo brasileño”. El exmandatario participará de la campaña por la reelección de Rousseff.
En momentos en que Rousseff perdía popularidad, aliados del PT e incluso voces dentro del propio partido defendieron una nueva candidatura de Lula, en reemplazo de Rousseff. “Mucha gente tiene ese sentimiento, pero cada cosa tiene su momento, el propio Lula nos ha dicho que la candidata será ella, es importante que la elijamos”, dijo a la AFP Nadia Araujo, afiliada del PT, de 47 años, que no consiguió ingresar al local del evento.
Muchos afiliados y periodistas, que se quedaron fuera cuando se llenó el local de un hotel de la capital donde tiene lugar la convención, empujaron puertas y barreras creadas para impedir el acceso.
Exguerrillera durante la dictadura, Rousseff, de 66 años, quien llegó al poder en 2011, es favorita a la reelección con 39% de la intención de voto, según una encuesta CNI Ibope divulgada el jueves. No obstante, la mandataria ha perdido popularidad en los últimos tiempos.
Su principal rival hasta el momento es el senador del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), Aecio Neves, que cuenta con un 21% de la intención de voto y oficializado por su partido hace una semana.
En tercer lugar aparece el socialista Eduardo Campos, exgobernador de Pernambuco que hasta hace pocos meses apoyaba al gobierno de Rousseff, con 10% de intención de voto.