Un panda gigante en un zoológico de Tokio ha dado a luz a un cachorro, reportó este lunes el operador del parque, cinco años después de que su primer crío murió poco menos de una semana de haber nacido.
La hembra de 11 años llamada Shin Shin, que reside en los Jardines Zoológicos de Ueno, dio a luz la mañana de este lunes. El sexo del recién nacido se desconoce hasta el momento, según el operador del zoológico.
Un funcionario del zoológico aseguró que tanto la madre como el bebé están en “buena salud”, y añadió que se ha visto a la madre cuando toma al pequeño con la boca, de acuerdo con la agencia japonesa de noticias Kyodo.
Shin Shin fue vista apareandose con un panda llamado Ri Ri el 27 de febrero y había estado mostrando signos de embarazo, incluyendo pérdida de apetito, alrededor del 16 de mayo, lo que llevó al zoológico a sacarla de la vista pública.
Ella comenzó a moverse sin descanso dentro de su jaula desde el sábado y el zoológico confirmó la llegada de la cría este lunes.
La panda gigante tuvo un cachorro en 2012 por apareamiento natural, el primero en 24 años en el zoológico de Taito Ward, pero murió de neumonía seis días después del nacimiento.
En 2014, se creyó que Shin Shin también está embarazada, pero más tarde resultó ser una falsa alarma. Los dos animales llegaron al zoológico en febrero de 2011 en calidad de préstamo otorgado por China.
Los pandas gigantes nacen muy pequeños y prematuros; un recién nacido pesa de 100 a 200 gramos, una milésima parte de su madre.
Expertos chinos han dicho que en los casos de primer parto para las madres pandas, del 60 a 70 por ciento de los cachorros mueren en la primera semana.
Sin embargo, las noticias sobre el último nacimiento generaron reacciones positivas, incluso en los ámbitos político y económico.
La gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, maniesfetó que está “muy encantada” con las noticias y espera con ansias el nombre del cachorro y el día en que se muestre al público.
Las acciones de la cadena de restaurantes Toh-Ten-Koh Corp. con base en Ueno saltaron temporalmente por el límite permisible del día para terminar en 224 yenes, un 6.7 por ciento desde el viernes, ya que los inversores especularon que más gente irá al zoológico para ver al cachorro.