La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, y familiares de niños con cáncer acordaron instalar las mesas de trabajo que sean necesarias para avanzar en sus demandas y poner fin al desabasto de medicamentos que impera en varios hospitales del país.
La funcionaria federal ofreció que este miércoles informará de manera puntual al presidente Andrés Manuel López Obrador del contenido del encuentro, al tiempo que manifestó su convicción de sacar adelante el problema, con el cual no solo se solidariza, sino que tiene empatía y tristeza.
“No tengo más palabras que decirles que su reclamo es legítimo”, dijo Sánchez Cordero durante la reunión celebrada en la sede de la Secretaría de Gobernación (Segob), en donde los padres de familia le reclamaron que “ustedes lo hicieron mal” y le recordaron que “usted es madre, usted sabe lo que duele (un hijo)”.
“Me queda claro lo que ustedes están solicitando, están viviendo y necesitando. No cabe duda de que, cada uno de ustedes, trae una historia de sus hijos, de sus hijas. No hay más que decirles que hay una sensación, cuando menos mía, personal, de solidaridad, empatía y de tristeza porque es cierto las que somos madres y que queremos y que tenemos ya nietos, sabemos lo que siente la vida de cada uno de ellos.
“Desde luego, yo me llevo todas estas preocupaciones, todas estas necesidades, todas estas peticiones en el corazón. No solamente me las llevo como funcionaria. Estoy sumamente sensible a todo lo que ustedes me han dicho. El día de mañana (miércoles) a primera hora estaré con el señor presidente haciendo el conocimiento de esta reunión, de lo que ustedes han manifestado, de sus peticiones, necesidades y angustias”, dijo con voz quebrada.
Sánchez Cordero comentó que este tema ha sido abordado durante la reunión del gabinete de seguridad que se realiza todas las mañanas con Ejecutivo federal, pues “nos ha ocupado en las últimas reuniones de seguridad, éste ha sido uno de los temas más importantes, obviamente tenemos toda la convicción de traer los medicamentos y sacar adelante el problema; de que todo el mundo tenga la atención médica”.
Enfatizó que se llevarán a cabo las mesas de trabajo que sean necesarias con el gabinete de salud, y opinó que se avanza en el sentido correcto para dar respuesta a una demanda que proviene de administraciones pasadas.
Sobre la denuncia que hizo Israel Rivas, padre de Dana, de cinco años de edad y padece leucemia linfoblástica aguda, en el sentido de que “hemos sido víctimas de una campaña hasta con amenazas de muerte”, dijo que pidió que subieran a sus redes la fotografía que se tomaron con ella, para que se demuestre que ya fueron atendidos.
“Yo misma les pedí que nos tomáramos una foto, que subieran un tuit, que dijeran que, efectivamente los hemos atendido, que son padres de niñas y niños con problemas con cáncer”, destacó la responsable de la política interna del país.
Ello, luego de que además de Israel Rivas, junto con Omar Enrique Hernández y Luis Fernando Reyes, han sido objeto de mentiras, amenazas de muerte en redes sociales, situación que dijo, “ya se está saliendo de control. Tememos por nuestra vida”, planteó el padre de Dana a Sánchez Cordero.
“Si este hostigamiento viene por parte del Gobierno de la República, responsabilizamos al gobierno de lo que le pueda pasar a nuestros hijos y familias en cualquier estado y en la capital del país, porque no se vale este lenguaje subversivo de quien gobierna y quien nos echa a pelear entre mexicanos. Tenemos miedo por la agresividad que hay en contra de nosotros. Nuestro único enemigo es el cáncer”, dijo en entrevista.
En el encuentro, Sergio Valencia, de Oaxaca, reclamó que las autoridades “no hicieron bien las cosas” y confió en que no haya más muertes por falta de protocolos o medicamentos.
Reyna Citlali Solís Arellano, cuyo hijo Mario falleció por falta de medicamentos, informó que entregará en Palacio Nacional todas las evidencias del caso, de las cuales la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), cuenta con un expediente, “porque fueron tres años de luchas y batalla y siempre era lo mismo, no había insumos”