La Delegación Sindical de Música de la Unidad Académica de Artes de la Universidad Autónoma de Zacatecas, realizó un paro indefinido de actividades y tomó el edificio universitario, al rechazar la imposición de un sistema de revisión del trabajo del docente cada hora, mediante la firma, y a través de un checador (personal comisionado del STUAZ), “por considerarlo incongruente con nuestras actividades académicas y la falta de condiciones laborales elementales”.
Informaron que el pasado 27 de septiembre la dirección del programa dirigió un documento a los docentes de los Programas de Música de la UAA , en el cual se exhorta a los mismos a apoyar al personal que, “a partir del próximo 3 de octubre, pasará a revisar el uso adecuado de los espacios asignados a los docentes para la impartición de sus respectivas clases”.
Los docentes argumentan que el documento enviado es improcedente ya que, por principio, para poner un “checador debe existir un contrato de carga de trabajo firmado de todos los docentes independientemente de su figura laboral”.
Agregan al respecto que “las cargas de este semestre no han sido elaboradas y el personal que estaría realizando esa labor no tiene un sustento legal, por lo que no tiene sentido que esta actividad la realice ningún personal, excepto los responsables de programas que deben estar al tanto del trabajo escolar y docente.
Sin embargo señalan que en general, no están disponibles en la Unidad de manera regular sobre todo en el horario de la tarde y el de los sábados.
Por todo lo anterior, indican, se acuerda realizar un paro indefinido a partir del próximo jueves 3 de octubre, e invitar a nuestros dirigentes al diálogo y a la reflexión conjunta, con el fin de establecer los compromisos necesarios para el buen funcionamiento de la academia.
En un escrito enviado a la redacción de Pórtico.MX enfatizan que “el comportamiento general de esta administración, se ha manifestado en un ambiente hostil hacia el trabajo colegiado, como lo demuestra ese documento, intimidante y poco dialógico”.
Añaden que “su contenido -dudoso y poco solidario con el docente-, es abrumador por la cantidad de cláusulas, fracciones y reglamentos, y que no en todas se muestran las causas de su finalidad u objetivo que dice ser: contar con un registro confiable sobre el uso correcto de los salones de clases”.
Argumentan que “durante varios semestres -como se dice- la administración ha tenido tiempo suficiente para resolver esos conflictos sin necesidad de afectar al colectivo de docentes en su totalidad”.
Los docentes paristas afirman que dicha medida de la dirección “es discriminatorio que sólo se realice a los programas de música (suponemos que se refiera a los programas de las licenciaturas en canto e instrumento) cuando se trata de un director de una Unidad Académica que se compone de varios programas y no sólo de los de “música”.
Asimismo señalan que “que no es un elemento contractual (UAZ-SPAUAZ) y no está avalada por la rectoria y, por tanto, viola los principios, usos y costumbres, así como el derecho y funcionamiento interno en detrimento del personal docente a quien va dirigido”.