El primer presupuesto que ejercerá en el 2025 la primera Presidenta de México, Claudia Sheinbaum, es engañoso y deja en el olvido a los más pobres al privarlos de servicios prioritarios que garantizan su bienestar. En contraste, proporciona o incrementa recursos públicos en áreas que desde la Presidencia de la República y el oficialismo pueden ser utilizados con fines políticos y electoreros.
La revisión de la propuesta presidencial ya se realiza en el seno de las Comisiones de Hacienda y Crédito Público y en la de Presupuesto y Cuenta Pública. Desde el primer momento en la oposición ya detectamos graves errores.
Me referiré a las incongruencias en el presupuesto a manera de advertencia al oficialismo y con la intención de que se contemple su corrección por el bien de nuestra nación y por las y los mexicanos.
En primer término y lamentablemente, la Presidenta Claudia Sheinbaum propone para el próximo año un egreso mayor al ingreso.
Es decir, mientras prevé recaudar 8.05 billones de pesos su compromiso es gastar 9.22 billones. Esto sólo lo podría hacer con endeudamiento, igual que lo hizo su antecesor. Entre las mayores líneas de egresos están 835 mil millones de pesos que destinará a los programas sociales y 189 mil millones para las megaobras caprichosas.
Para el 2025 la Federación dejará en el abandono a estados y municipios al darles menos recursos, ya que en términos reales decrecerá en 1.2% el gasto federalizado, para dejarlo en 2 billones 633 mil millones de pesos. Es decir, los gobiernos locales recibirán 32 mil millones de pesos menos que en el 2024.
La reducción del gasto federalizado se centrará en el Ramo 33 Aportaciones Federales, con un 4.6 por ciento. La bolsa sólo sería de 1 billón 61 mil millones de pesos. Es una decisión gravísima, porque de esa bolsa los gobiernos estatales y municipales reciben los recursos para atender necesidades de salud, seguridad, educación, saneamiento financiero e inversión en infraestructura.
Personalmente me preocupan los recortes del Ramo 33, porque se centran en dos áreas fundamentales para el bienestar social: el Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud, al que le quitan 42.5%; y el Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública, que disminuye en 0.4. Adiós a la salud como Dinamarca y a la pacificación de México.
También es alarmante que el 17% del gasto del próximo año se pretenda financiar con deuda. Recordemos que del 2019 al 2024 la deuda neta creció en 5.6 billones de pesos y representa una intensa presión para las finanzas públicas.
Falta mucho por hacer en el combate a la pobreza. Según el CONEVAL, ese organismo que ya desaparecen, 56 millones de personas viven con un ingreso inferior a la línea de pobreza; 25 millones más, experimentan rezago educativo; 50 millones, viven con carencias de salud; y 65 millones, no tienen seguridad social. En tanto, la titular del Ejecutivo en el 2025 percibirá un salario anual neto de 2 millones 69 mil pesos. ¡Primero los pobres!
En el PAN pedimos que se garanticen presupuestos suficientes para los órganos autónomos, a fin de que cumplan con sus atribuciones, en lugar de desaparecerlos.
Aclaro que en el PAN estamos de acuerdo en garantizar la eficiencia del gasto público frente a la escasez de los recursos. Pero, no estamos de acuerdo en abandonar a la gente ni en dejar de lado la responsabilidad del Estado de otorgar los servicios públicos y proteger los derechos humanos.
Además, exigimos un diálogo de ida y vuelta. Queremos que el oficialismo escuche las propuestas de la oposición, para que las tome en cuenta y sí haga reasignaciones del gasto, impulse el desarrollo y no haya distinción en la asignación de recursos.
En conclusión: las legisladoras y los legisladores federales del Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional (GPPAN) tenemos la firme convicción de realizar un análisis profundo y a conciencia de la propuesta del Paquete Económico 2025 para que ningún ciudadano quede fuera del presupuesto.
Noemí Luna
Diputada Federal