ZACATECAS.- Unos 800 estudiantes de la Universidad Autónoma de Zacatecas, de la Escuela Normal Rural Matías Ramos Santos y del Instituto Politécnico Nacional, se unieron a la manifestación nacional, que a un año de la tragedia de Ayotzinapa, Guerrero, aún reclama justicia.
El contingente de jóvenes en pie de lucha partió de la Secretaría de Educación en Zacatecas (Seduzac) con destino a la Plaza Bicentenario, donde tuvieron un mitin político.
A lo largo del boulevard José López Portillo y el Adolfo López Mateos, los chicos dejaron el rastro de su andar con graffitis y carteles reclamando a aquellos 43 normalistas que dejaron un hueco en el corazón de México.
Ya en la Plaza Bicentenario, de manera organizada y con sentencias previamente ensayadas, comenzaron a contar y pararon justo en el 43 y después clamaron por justicia.
Un majestuoso cielo zacatecano que ni una gota de agua derramó en este primer aniversario de la tragedia de Ayotzinapa y que abrigó los tragos amargos de una nación lastimada. “Ninguno de nosotros olvidamos la madrugada del 26 de septiembre de 2014 donde fueron asesinados 43 hermanos por orden de José Luis Abarca”, exclamaban las voces.
“Ayotzinapa es un grito de calvario, de impotencia y de injusticia, de todos esos padres que hasta el día de hoy se duermen con la esperanza del día del mañana alguien les hable de sus hijos”, fue la voz de una joven que pedía por mayores oportunidades de trabajo.
“Ayotzinapa es el resultado de una reforma educativa fracasada donde no se toman en cuenta escuelas rurales. Ayotzinapa es hambre, miseria, falta de agua, la casa, un país que lo único que hace es cerrarnos las puertas al congreso, estudiantes que pedían a gritos a un gobierno miserable de que se acordara que existe la pobreza”, eso, para los manifestantes, fue el propósito de la movilización de normalistas aquella noche, por lo que hoy nuevamente volvieron a levantar la voz.
“Duele hasta el alma, pero nos robaron tanto que hasta el miedo se llevaron”.
Por la tarde, también partió un contingente hacia Plaza de Armas, encabezado por el Frente Popular de Lucha Zacatecana bajo la premisa de que el estado neoliberal ordenó el asesinato de los 43 normalistas.