ZACATECAS. Hay que insistir y continuar con la ayudar a los damnificados de los sismos del mes de septiembre, pues representa un riesgo grande el olvidarnos de estas tragedias, sentenció Sigifredo Noriega Barceló, obispo de la Diócesis de Zacatecas.
Expresó que aún queda mucho por repartir, pues el daño de los estragos ocasionados por la naturaleza es grande y se necesita de un apoyo posterior para que los afectados terminen de superar su duelo, ayudando a sanar sus heridas por las pérdidas humanas y patrimoniales.
Comentó que por parte de la diócesis las colectas de los domingos se están haciendo en favor de los damnificados, con las que ya se ha reunido 450 mil pesos, que se invertirán en algún proyecto concreto que beneficie a los que hace falta.
“No hay que olvidarnos, porque puede suceder la noticia y al día siguiente dejar de serlo; es el riesgo que veo, el olvidarnos, por lo que pido no dejemos”.
Con respecto a los afectados por el desbordamiento del arroyo Atotonilco en el municipio de Valparaíso, el obispo manifestó que de igual manera son situaciones de la naturaleza que nadie quisiera, sin embargo, precisó que no están solas y la prueba está en la respuesta inmediata que se brindó parte de las autoridades.
Instó a las personas que se encuentran cerca de las comunidades afectadas por el desbordamiento, para que den la mano a las personas necesitadas y que tienen en su proximidad, pues son hechos imprevistos que destruyen, pero de los que se puede salir adelante.
“Los patrimonios se pierden pero habiendo vida se puede recuperar poco a poco”, puntualizó.
Con o sin ley, el aborto es aborto
“Ojalá se discuta y no se haga una ley solo por hacerla o quedar bien con otras organizaciones”, fue lo que concretó Noriega Barceló en respuesta al tema de la interrupción voluntaria del embarazo como un derecho fundamental para las mujeres en la ley.
Ante el cuestionamiento de la aprobación legal para realizar abortos, enfatizó que “como católicos nunca vamos a estar de acuerdo con esta práctica, porque es la muerte querida de alguien inocente”, y ya tiene que ver con lo que define el inicio de la vida que es la concepción.
Refirió que existe misericordia para las personas que en algún momento de su vida acuden en esta práctica, pues el perdón siempre existe, sin embargo también siempre hay opciones para que las personas piensen mejor las cosas.