Bajo la premisa de “la palabra no es solamente un sonido y está llena de vida, a través de ésta a muchos de nosotros nos salvó en la poesía”, el escritor Veremundo Carrillo justifica el verso “cómo arden las palabras”, autoría de la poeta Dolores Castro, mismo que funge como subtítulo del próximo diplomado que lleva por nombre “Literatura Zacatecana”.
Coordinado por el Instituto Zacatecano de Cultura (IZC) “Ramón López Velarde”, dicho diplomado que impartirá el poeta e investigador, es parte de las ofertas académicas que brinda este centro cultural con la finalidad de acercar al público en general al conocimiento de la producción literaria local así como de sus creadores.
Con los objetivos de reconocer la identidad local a través de 100 años en que Zacatecas se ha posicionado como una meca de importantes artistas, en este caso los escritores, así como reconocer a esta disciplina como una enseñanza de lo general , Veremundo Carrillo comenzará este curso en el que realizará un recorrido por los albores de la literatura zacatecana para así continuar concluir con la presencia in situ de los escritores actuales.
La senda literaria local, comenta Veremundo Carrillo, comenzará con los documentos escritos por Tenamaxtle, que es considerado como el iniciador de la defensa de los derechos humanos, mismos que fueron apoyados en la redacción en castellano por Bartolomé de las Casas, considerando importante tomarlos en cuenta pues “aquí en Zacatecas no hay literatura indígena, pero sí el pensamiento de Tenamaxtle”.
El escritor originario de Tepetongo, para el diplomado que está próximo a impartir, temáticamente propone la revisión cronológica de los procesos creativos de escritores de poesía, teatro, cine, periodismo, entre otros.
Se habrá de revisar la obra de autores como Ramón López Velarde, Mauricio Magdaleno, Ignacio María de Castorena, Fernando Calderón, Tomás Mojarro, Amparo Dávila, Severino Salazar, Roberto Cabral del Hoyo, así como de otros 40 exponentes de las letras zacatecanas de los que su proyección, a partir de sus publicaciones o creaciones, han sido casos particulares.
La elección de éstos, que el escritor califica como “objetiva y neutral”, está basada en documentos que él mismo ha escrito como producto de investigaciones que le han llevado a descubrir y conocer escritores locales no sólo capitalinos sino de municipios como Jalpa, Villa Nueva, Calera, Jerez, entre otros, que fueron testimoniados en el libro de su autoría Barro que suena a plata.
El tratamiento del diplomado en Literatura Zacatecana se regirá bajo temáticas como la Literatura Académica, en la que enfatizará las producciones que se han logrado en universidades y talleres; así como la Literatura Experimental, en la que se centrará en las memorias, la tradición oral de los pueblos, misma que considera como “un brote espontáneo de las regiones, una literatura olvidada a pesar de su riqueza”.
Dirigido al público que gusta de la literatura en todas sus dimensiones, así como para la gente enamorada de esta arte, el diplomado en Literatura Zacatecana pretende reunir no sólo a lectores especializados y escritores locales sino a amas de casa, jubilados, profesores de distintas áreas, como ha ocurrido en anteriores emisiones académicas en el que ha sido titular y en los que no se ha limitado el cupo del cursos, llegando en ocasiones hasta 60 participantes constantes.
El curso que impartirá quien también es catedrático universitario y uno de los máximos representantes de la literatura zacatecana, está dividido en dos módulos; el primero de ellos comienza el 25 de febrero y culminará el mes de julio.
El segundo inicia en el mes de septiembre y finalizará en diciembre y tendrá lugar en la Sala Ex Libris del Centro Cultural Ciudadela del Arte los días lunes de cada semana, de las 17:00 a las 20:00 horas. La cuota de inscripción es de 300 pesos por módulo e incluye material general así como la antología con la que se trabajará.