Zacatecas Zac.- El Secretario de Seguridad Pública, Arturo López Bazán, encabezó este miércoles la caravana de Seguridad y Reyes Magos, a través de la cual se repartieron más de mil 500 juguetes en los municipios de Zacatecas, Guadalupe y Fresnillo.
De igual manera se entregaron roscas en asilos de ancianos, casas cunas y casas hogar.
Lo anterior con el objetivo de llevar a las niñas, niños y adultos mayores, sonrisas a través de obsequios con motivo del “Día de Reyes Magos”.
La entrega se realizó respetando en todo momento las medidas sanitarias, con el objetivo de continuar fomentando las tradiciones mexicanas y la cercanía de la sociedad con sus policías.
En el arranque de la Caravana de Seguridad, en la que participaron elementos de Policía Estatal Preventiva (PEP), Policía Metropolita, Policía de Seguridad Vial y Policía Penitenciaria, celebrada en las instalaciones de la SSP, el Secretario de Seguridad Pública, Arturo López Bazán, reiteró el compromiso de las instituciones que dirige para velar por la seguridad de las y los zacatecanos.
Señalo que con estas acciones de busca fomentar la cercanía y proximidad social, que identifiquen a los elementos policiales como amigos y en quienes pueden confiar.
En calles de Zacatecas, Guadalupe y Fresnillo, acompañado de los Directores de Metropol, Gabriel Zarraga, Director de Policía Vial, Oswaldo Caldera y elementos de las cuatro corporaciones que integran la SSP, López Bazán entregó juguetes y bolos.
Posteriormente y como parte de las acciones para fortalecer la política humanista que a través de la Estrategia de Seguridad Pública Integral para Zacatecas (ESPIZ) impulsa la SSP, en casas cuna, asilos de anciano y una casa de adolescentes, se entregaron entre porras y palabras de agradecimiento, roscas para continuar conmemorando el 06 de enero.
La SSP aportó un granito de arena con la entrega de juguetes, dulces y cubrebocas, una acción con causa a la que se sumaron todas las áreas de la SSP.
Resulta importante señalar que esta iniciativa nace en congruencia con la ESPIZ y de los recorridos que realizan diariamente en de las colonias de la periferia, así como en el centro de la ciudad, donde detectan la necesidad de los niños, que saben que sus padres viven el día a día y por lo tanto se les dificulta darles un obsequio.