El secretario de Estado norteamericano, John Kerry, aseguró que las pruebas de que dispone Estados Unidos sobre la responsabilidad del régimen de Bachar al Asad en el ataque del pasado 21 de agosto en Damasco con armas químicas son “claras y convincentes”.
Kerrry aseguró que su país tiene “alta confianza” en el hecho de que el responsable de los ataques es el presidente sirio y que, pese a que Washington no podrá desclasificar ciertos detalles, sabe que fuerzas leales a Al Asad se prepararon para el ataque y lo llevaron a cabo.
En conferencia de prensa, prometió este viernes que su país no repetirá la experiencia de la guerra de Irak de 2003 si decide lanzar una acción militar contra Siria, a la que acusa de haber usado armas químicas.
Kerry anunció que su país tomará una acción militar selectiva en Siria, sin tropas terrestres, una vez que se haya confirmado información clasificada y que el Congreso y el presidente Barack Obama lleguen a un consenso.
“No repetiremos aquel momento”, declaró Kerry en una rueda de prensa sobre el conflicto en Irak de hace 10 años. “Nuestros servicios de inteligencia han revisado y revisado con cuidado la información sobre este ataque”, precisó el jefe de la diplomacia estadounidense en referencia al ataque del 21 de agosto a las afueras de Damasco que dejó centenares de muertos.
