Bernardo Hernández/PórticoOnLine
Las policías municipales de Zacatecas fueron las corporaciones que generaron más quejas ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos en 2013.
Los preventivos de los municipios sumaron un total de 142 quejas, un 47.18% del total registrado. Las detenciones arbitrarias (68 casos) fueron el motivo más frecuente.
En segundo lugar quedó la Policía Ministerial del Estado con apenas 46 inconformidades de las que tomó conocimiento la CEDH. En 14 casos se denunciaron lesiones provocadas por los agentes investigadores.
La Dirección de Tránsito completó el podio de las corporaciones con más señalamientos ciudadanos con 37 reportes, una queja frecuente fue el cobro excesivo de multas.
En el cuarto lugar se quedó la Policía Federal Preventiva con un total de 36 voces violatorias. Los cateos o visitas domiciliarias ilegales fueron el objeto de denuncia más frecuente con ocho denuncias registradas.
Otras corporaciones cuya actuación motivó quejas ante el organismo de derechos humanos fueron la Policía Metropolitana (12), la Marina Armada de México (9) y el Ejército Mexicano (8). Las violaciones más reportadas fueron lesiones y detenciones arbitrarias.
La Policía Estatal Preventiva merece una mención especial. Si bien se registraron apenas once quejas contra la corporación, en dos de los casos la voz violatoria fue la de homicidio.
En total se registraron 301 quejas en 2013
En la CEDH consideran normal que las policías municipales sean objeto del mayor número de quejas. La alta rotación de personal existente en las direcciones de seguridad de los municipios dificulta la tarea de capacitar a los agentes en cuestiones de derechos humanos.
En cuanto a las fuerzas de seguridad federal que operan en la entidad, estas han sido motivo, en los últimos años, de algunas manifestaciones de colonos que pedían su salida de Zacatecas por violaciones a las garantías individuales. El origen de ese repudio, sin embargo, fue atribuido por fuentes de seguridad estatales a la acción de bandas criminales.
La Policía Estatal Preventiva ha sido objeto de varios señalamientos por parte de políticos y representantes de organismos ciudadanos. Algunos elementos contribuyeron a “lastimar” la imagen de la corporación al participar en crímenes, algunos de ellos con saldo mortal, como asaltos a tiendas de conveniencia o al cometer indisciplinas como usar su arma de cargo fuera del horario de trabajo o huir del sitio de un choque.