El titular de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), Arturo Nahle García informó que los municipios limítrofes de los estados de Zacatecas y Jalisco serán reforzados ante el recrudecimiento de la violencia en Michoacán, por temor a que ingresen grupos delictivos como Los Caballeros Templarios,
Dicha estrategia se desarrollará porque se está presentando el ‘Efecto Cucaracha’ en Michoacán, es decir el grupo criminal que operaba en la región está saliendo de aquel estado y se está refugiando en otros estados, entre ellos Jalisco.
“Hoy tenemos que reforzar esa colindancia porque Jalisco es un estado que colinda con Michoacán”, dijo el procurador al admitir que el gobierno está preocupado por la situación, ya que entre 2011 y 2012 una organización delictiva autodenominada como Cárteles Unidos ingresó al territorio zacatecano por los municipios que colindan con Jalisco.
Recordó que entre 2006 y 2011, el cártel de Los Zetas se asentó en Zacatecas apoderándose prácticamente de la totalidad del estado; sin embargo, a mediados de 2011 y principios de 2012 irrumpió Cárteles Unidos que vino a disputarle el territorio, rutas y mercados de droga.
El procurador destacó que en ese entonces, se creyó incluyéndose él mismo, que otros grupos delictivos iban a llegar a Zacatecas, pero nunca se imaginaron que fueran a entrar por el sur sino por el occidente, concretamente por el estado de Durango, lo que provocó aquí el recrudecimiento de la violencia.
Resaltó que es necesario que Zacatecas se blinde de mejor manera de los estados que tienen una problemática más compleja en el tema de la seguridad por tal motivo estaremos en coordinación con las UNIRSE de todos los puntos que tenemos” para estar precavidos”.
Aseguró que hasta el momento no existen “grupos de autodefensa en Zacatecas mucho menos grupos comunitarios”. Dijo que lo que sí es una costumbre es que existan ganaderos que tengan armas en su casa para protegerse del abigeato y eso “si está autorizado”.