Bernardo Hernández / PórticoOnLine
El STUAZ exige la renuncia de Armando Silva, un grupo de profesores de la institución también, los directores apoyan al rector.
Silva Cháirez declara que no va a renunciar y que ha cumplido con los compromisos contraídos.
En el SPAUAZ han optado por recordarle al rector los pendientes que tiene con ese sindicato.
Ese es, de forma sucinta, el recuento de lo que ha sido la UAZ en los últimos días.
El discurso de Rafael Rodríguez, dirigente del STUAZ, sigue en la postura asumida luego de que la institución no despidió a ningún técnico académico en la primera quincena de marzo.
El gremio del personal académico, luego de levantar la huelga y superar la embestida del STUAZ, ha seguido el camino de los oficios.
El pasado 21 de marzo envió a la rectoría un documento en el que exigen al rector presentar personalmente a los delegados del SPAUAZ, por escrito y con desglose incluido, los avances de las gestiones dirigidas a solucionar el problema de las deudas de la UAZ con el ISSSTE, el Fovissste y el SAR.
Para satisfacer al personal académico, Armando Silva deberá informar si ya reservó el recurso para seguridad social correspondiente a la primera quincena de marzo, dinero que debió entregarse el pasado jueves.
También deberá informar si ya cuenta con la partida presupuestal para el incremento al salario y a las prestaciones del año en curso.
Y no sólo eso. El SPAUAZ quiere que el rector le proporcione el convenio financiero del presupuesto que la Secretaría de Educación Pública le autorizó a la UAZ en este 2014.
Un pendiente más de Silva Cháirez con los docentes es informar sobre el proceso para otorgar seguridad laboral al personal académico del Programa de Extensión Universitario de Lenguas, el Programa Único de Inglés, el Centro de Aprendizaje y Servicios Estudiantiles, el Programa de Estudios e Intervención para el Desarrollo Alternativo y el CECIUAZ.
En el convenio de levantamiento de huelga, Silva Cháirez se comprometió a dar cuentas al SPAUAZ sobre los tópicos mencionados a partir de la segunda quincena de marzo.
En el sindicato del personal académico están preocupados porque, a una semana de que concluya el mes, no han visto sino un aumento en la desconfianza hacia el rector y en las opciones de que surja una situación de conflicto “que nadie desea”.
El gremio académico espera noticias de Armando Silva. El STUAZ también, y los estudiantes, no se diga.