Con un saludo de cañón de agua, salió este lunes desde Miami el primer vuelo regular de Estados Unidos a La Habana en más de 50 años, que ocurre justo tras la muerte del líder de la Revolución cubana y principal antagonista de Washington, Fidel Castro.
Desde agosto, las aerolíneas estadunidenses han estado volando al interior de Cuba, pero la capital aún estaba vedada.
La nave de la compañía American Airlines (AA) partió a las 07:30 locales desde el aeropuerto internacional de Miami, marcando otro momento clave en la historia de la aviación entre ambos países.
Los pasajeros, que no tenían idea cuando reservaron sus billetes que el vuelo coincidiría con los funerales de Fidel Castro, fallecido el viernes a los 90 años, fueron recibidos con croquetas, pastelitos y sombreros de paja de regalo.
“Es una experiencia de una vez en la vida”, dijo una pasajera estadunidense, Priva Rhat, a periodistas. “Será interesante ver cómo responde la gente a su fallecimiento”.
Hasta ahora, AA servía a Camagüey, Cienfuegos, Holguín, Santa Clara y Varadero. Sumando La Habana, ahora operará 13 vuelos diarios entre Cuba y Estados Unidos.
Con este nuevo tramo, “nos convertimos en la primera aerolínea estadounidense que ofrece un servicio regular a la capital cubana en más de 50 años”, dijo Martha Pantín, portavoz de AA.
A partir del miércoles, la aerolínea tendrá cuatro vuelos diarios desde Miami hasta La Habana y otro desde Charlotte, en Carolina del Norte.
Una hora y media después, a las 08:58 locales, JetBlue envió su primer vuelo de Nueva York a La Habana, tramo que hará diariamente a partir de ahora.
Las aerolíneas Spirit, Frontier, Delta y Southwest también comenzarán a ofrecer rutas para completar de aquí a fin de año 110 vuelos diarios a la isla, 20 de ellos a La Habana.
JetBlue fue la compañía que inauguró el primer vuelo comercial de Estados Unidos a Cuba desde 1961 el pasado 31 de agosto. Partió desde Fort Lauderdale, al norte de Miami, y llegó a Santa Clara, en el centro de la isla.
El martes arrancarán los vuelos diarios de JetBlue desde Orlando, en Florida, y a partir del 30 de noviembre partirán dos vuelos diarios -excepto los sábados- desde Fort Lauderdale a La Habana.
“Nuestro histórico primer vuelo (del 31 de agosto) dio inicio a una nueva era en el transporte en Cuba, y una vez más JetBlue hará historia”, dijo Robin Hayes, presidente de la empresa, en un comunicado.
La inauguración de los vuelos a La Habana ocurre en momentos muy sensibles, tanto en la isla como entre la comunidad cubanoestadunidense en el exilio, luego de la muerte de Fidel Castro.
Mientras Cuba decretó nueve días de duelo y el país guarda un grave luto, los cubanos en Miami no han parado de festejar desde el viernes por la noche.
Estados Unidos y Cuba reanudaron sus nexos diplomáticos en 2015 y acordaron en febrero de este año reiniciar los vuelos diarios entre ambos países.
Desde 1979, los dos países habían estado enlazados por vuelos charter -es decir, rentados por agencias de viajes-, que suplieron la demanda. Pero eran muy costosos.
Hasta agosto había apenas una treintena de vuelos charter diarios, normalmente por 500 dólares o más. Los nuevos vuelos de aerolínea, en cambio, no sólo son más frecuentes, sino que cuestan entre 100 y 200 dólares.
El embargo de Washington aún prohíbe el turismo en Cuba, pero los estadunidenses pueden viajar dentro de otras 12 categorías. Las más utilizadas son el intercambio cultural o educativo.