Ante la falta de las leyes secundarias de la nueva reforma educativa, este año la Secretaría de Educación Pública (SEP) entregará plazas docentes por antigüedad, acreditación de un curso y entrega de un ensayo, según se establece en los lineamientos que sustituyen al requisito de acreditar un examen de conocimientos y habilidades que se aplicó el sexenio pasado.
Sin embargo, dichos lineamientos no han sido publicados en el Diario Oficial de la Federación (DOF), sólo se entregó un oficio a las autoridades educativas estatales y federales firmado por Francisco Cartas, coordinador Nacional del Servicio Profesional Docente.
Esto implica que los maestros y la sociedad ni siquiera conocen el valor que se otorgará a cada uno de los criterios de evaluación, ni qué autoridad será la encargada de revisar sus evaluaciones, ni qué pasará con aquellos que acrediten pero no alcancen plaza.
La relevancia es porque la reforma educativa del presidente Andrés Manuel López Obrador derogó la reforma del sexenio pasado, la cual establecía la obligatoriedad de acreditar un examen de conocimientos y habilidades, como único mecanismo para ingreso y promoción en el servicio docente.
En mayo pasado, los legisladores sólo aprobaron las reformas a la Constitución para concretar la nueva Reforma Educativa, pero aún está pendiente la creación de las leyes secundarias, donde se debe establecer el nuevo mecanismo para la asignación de plazas docentes.
Ante ese vacío legal, la SEP sólo diseñó los “Lineamientos para dar cumplimiento para dar cumplimiento al Artículo Segundo transitorio del decreto por el se ser reforman, adicionan y derogan diversas disposiciones de los artículos 3ro, 31 y 73”, y envió con un oficio a las autoridades de los estados el 21 de mayo pasado.
Dichos lineamientos aplican para quienes se inscribieron a procesos de selección previos, pero “se dará preferencia a los egresados de las normales”, aunque no exista un sustento jurídico que avale esa consideración.
Además, mientras en el proceso anterior el único criterio de evaluación era un examen, este año la antigüedad será el factor para otorgar las plazas modalidad “hora-semana-mes”, es decir, para maestros de secundaria que imparten materias por hora.
“La autoridad educativa, local y los organismos descentralizados que cuenten con plazas vacantes definitivas por horas-semana-mes, podrán asignar, conforme a las necesidades del servicio, horas adicionales al personal del plantel que reúna el perfil requerido para la asignatura o módulo que imparte y cuente con mayor antigüedad en el servicio público educativo”, establece el numeral 35 de los lineamientos.
En tanto, los requisitos para las plazas de tiempo completo serán “concluir satisfactoriamente los módulos del ‘Curso integral de consolidación de las habilidades docentes’, así como obtener la acreditación del curso’” y “presentar un breve ensayo sobre la mejora continua de la educación o una propuesta de planeación didáctica de clase, en un contexto específico”.
También deberá presentar la documentación sobre su promedio general de la carrera, los cursos extracurriculares, los programas de movilidad académica y experiencia docente, en la plataforma digital de la SEP.
Para los cargos de dirección en otros procesos se “obtendrá el nombramiento definitivo”, mientras que las plazas de dirección vacantes en educación básica y media superior serán cubiertos por “personal de la escuela que reúna el perfil y cuente con mayor antigüedad en el servicio público” con vigencia hasta el término del ciclo escolar.
En el limbo
Aproximadamente 900 personas agrupadas en el movimiento “Profesores de la 4ta transformación de Baja California Sur”, que habían acreditado el examen de ingreso al servicio docente el año pasado, pero que no alcanzaron plaza, perdieron su “idoneidad”, es decir, la vigencia de su acreditación establecida hasta el 31 de mayo.
Debido a la derogación de la Reforma Educativa del expresidente Enrique Peña Nieto, también se derogan los resultados del proceso de selección del año pasado. Por eso es que los maestros deberán inscribirse de nuevo.
“Quedamos en el limbo. Somos un daño colateral de la reforma del presidente Peña y del presidente López Obrador”, advierte el maestro Antonio Virgilio, profesor de Baja California que aprobó el examen el año pasado, pero deberá repetir el proceso para obtener una plaza.
Tampoco está de acuerdo en que en los lineamientos se advierta que se dará preferencia a los egresados de las normales, porque “somos muchos los que estudiamos en la Universidad Pedagógica Nacional y otros que estudiaron en universidades privadas, pero tenemos la formación y la experiencia”.