El artista plástico Ismael Guardado y el cineasta Iván Ávila Dueñas, regresan a la tierra que los vio nacer para contar sus historias y mostrar sus proyectos, además, describen sus próximas actividades culturales referentes a la plástica y el séptimo arte, respectivamente.
Ambos creadores, hace ya tiempo emigraron a otras tierras con las ganas de emprender nuevos caminos en la busca de trascender las fronteras, lo que definen como una nueva aventura, el explorar y enriquecer su ámbito cultural con una más amplia visión artística.
Sin embargo, ambos continúan apostando por la cultura de su terruño, así como, enriquecer la producción de su obra al ejecutar sus inquietudes y quehacer artístico muy particulares.
Ismael Guardado, visitó la Ciudadela del Arte, puesto que una de las salas de este recinto cultural, lleva su nombre. Fue recibido por el Subdirector Manuel Meza, con quien dialogo ampliamente con el propósito de programar actividades en este espacio dedicado, a él, como artista plástico.
Guardado, oriundo del municipio de Ojocaliente Zac., reside en la actualidad en la ciudad de Guadalajara, la ambición de emprender nueva producción artística lo lleva a presentar nuevas exposiciones y viajar a la ciudad de la Paz Baja California, el próximo mes de mayo.
Asimismo, en el Estado de Guanajuato, montará también una muestra a mediados de este año, en ambas expondrá su obra en grabado, escultura, dibujo, cerámica y arte objeto, con su tradicional transición visual contemporánea multidisciplinaria.
Un nuevo proyecto cinematográfico inspirado en el tema de la migración en Zacatecas, inspira en estos momentos al director de las artes visuales, el zacatecano Iván Ávila Dueñas quien reside desde hace algunos años en la ciudad de México.
En su visita a Cineteca Zacatecas, conversando con la directora Gaby Marcial, el cineasta comentó que actualmente trabaja en la producción de una película cuyas locaciones tendrán lugar en el municipio de Monte Escobedo.
La trama es la historia de una mujer que permanece en el abandono, como muchas historias de vida, o emigran al vecino país del norte en busca del sueño americano.
La filmografía más conocida de Ávila Dueñas, está conformada por Su ópera prima en largometraje, Adán y Eva todavía (2004). “La sangre iluminada (2007), Zacateco (Labor Vicint Omnia) (2010), Documental Histórico. “La Vida sin memoria parece dulce”, (2012), (Recuperación de antiguas filmaciones familiares en la entidad).
Al decir de los críticos, las cintas fílmicas del productor tienen la habilidad de conjuntar la ficción y la realidad.
Personajes reconocidos, uno y otro mantienen la actividad artística individual e impronta personal con gran aporte en el colectivo cultural del país.